Rarita ➳ DoDaeng | #4

O16 | Una cita

Los cabellos de Yoojung se movían con el ritmo del viento mientras veía el hermoso atardecer ese día. Su pequeña y tímida sonrisa adornada en su rostro era símbolo que se estaba divirtiendo al estar con la más alta allí en las orillas de la playa, porque sí, no supo ni cómo había sacado el valor de invitar a la más alta a salir.

Lo que menos que Yoojung imaginó fue ser aceptada por Doyeon sin negarse. Incluso pensó recibir unos cuantos insultos debido a su persona y reprendida por ser una mujer que gustaba de otras mujeres, pero no fue así, ahora estaban en una cita.

Por otro lado Doyeon a su lado mantenía en su rostro una expresión helada, aunque detrás de esa máscara estaba llena de inseguridad y temor, mientras estaba sosteniendo su sombrero con sus manos para que el viento no se lo quitará y se fuera lejos. No estaba acostumbra a estar de esa manera, en algo que podían llamar 'cita' y menos con una mujer, todo era tan nuevo y le daba un poco de miedo. Jamás en su vida pensó terminar así y menos con la chica que había arruinado su reputación.

Se supone que su sueño había sido salir con un chico guapo que cuidará de ella y la amará, no una chica, pero en fin, el destino era extraño.

━ Gracias por acompañarme, Doyeon. ━ Dijo la voz de la bajita acercándose a la más alta para mirarla con una sonrisa.

Sus manos se movían un poco nerviosa de tener a la más alta cerca de ella. Es decir, tenía a la persona que le gustaba desde la secundaria acompañándola en una especie de 'cita' lo cual era mucho para su cabeza.

Por otro lado Doyeon miró a Yoojung sin alguna expresión en su rostro, mirando el bonito atardecer de ese día. En su mente, la pobre castaña estaba teniendo un caos existencial. Aún sentía que lo estaba haciendo estaba mal, aunque su psicólogo y mejor amigo, Kim Myungsoo dijera que todo estaba bien y que no había nada malo en que una mujer despertará cosas nuevas en ella, aún existía aquella culpa de que sus padres estarían decepcionados del camino que estaba tomando, sin que estos supieran.

Ellos no sabían nada y tenía miedo.

━ Me he divertido también, gracias a ti por invitarme. ━ Respondió Doyeon, para sentarse en la arena de la playa.

Le gustaba estar así. A Doyeon le costaba tirar su orgullo y admitirlo en voz alta, pero le gustaba la compañía de Yoojung. Tenía tantos años en que la castaña no sentía esa paz interior.

La última vez que se sintió tan tranquila de esa manera, fue cuando su abuela aún vivía y la acompañaba a todos lados. Ella era la única distinta a toda la familia, y Doyeon la extrañaba por eso, porque seguramente ella la comprendería mejor que nadie, y la amaría aún si sus preferencias estuvieran cambiando.

Yoojung trajo la pequeña hielera con algunas bebidas dentro de ella, para acompañar a Doyeon a su lado.

Quería que la más alta disfrutará de esa primera cita.

━ El atardecer es muy bonito. ━ Comento Yoojung mirando cómo algunas aves pasaban por allí.

Doyeon sonrió por primera vez esa tarde.

Por alguna razón se sentía libre. Sin ataduras, solo simplemente siendo ella misma.

━ Tienes razón, es hermoso.

No había sido mala idea salir con Yoojung, porque realmente Doyeon estaba disfrutando de ese momento.

Esa había sido una buena cita.

Algo que jamás olvidaría.