BLUE LEMONADE || SEULRENE

~27~

Habían pasado ya tres días, en los cuales no había salido de mi casa, ni siquiera para ir a clases.

—Seulgi, Debes volver a clases, si no lo haces perderás el semestre—comentó Wendy quien se encontraba detrás de la puerta de mi habitación esperando que le abriera

—No lo haré, no me importa perder el semestre, el año, no quiero saber nada

—¿En serio no abrirás? Yo no tengo la culpa de nada esto, no te desquites con personas inocentes - En eso tenía la razón

Abrí por fin la puerta dejando que entrará en mi habitación.

—Luces horrible

—Gracias, me alagan tus palabras

—Seulgi ve a darte una ducha de agua fría, yo trataré de limpiar tu desorden— Obedecí ya que no me quedaba otra opción 

Al decir verdad la ducha me relajó un poco, cuando salí, mi habitación estaba totalmente diferente, las latas de cerveza vacía  que deje bajo mi cama Ya no estaban, sin duda había hecho un buen trabajo.

—Te luciste, me sorprende que hayas acabado con mi desorden en tan poco tiempo

—¿Alguna vez tu madre te dio una orden y se te olvidó cumplirla?—Negué —Bueno, a mi si me pasó así que cuando veía que mi madre estaba por entrar recogía todo antes de que notara que olvide hacerlo

—Por lo visto te pasó varias veces porque ya hasta experiencia tienes

—Algo así, ¿te parece si salimos a comer?

—No tengo ánimo, así que no creo que...—Mi estómago gruñó pidiéndome que lo alimentara

—Conociéndote seguro sólo haz bebido cerveza, ni siquiera has de haber probado un sólo bocado

—Okay, iremos a comer y Bueno, aprovecharé para hacer la despensa

Salimos al restaurant de fideos que quedaba a unas cuadras de mi casa, ordenamos y comimos en silencio, me comenzaba a hacer efecto el alcohol que ingeri.

—Vayamos a terminar las compras, mi cabeza comienza a doler

Caminábamos por los pasillos, tomando lo que creí necesario para no volver a salir dentro de un par de semanas.

—Sigo pensando que estas siendo algo exagerada Seulgi, debes seguir con tu vida, esto no debe impedirtelo

—Lo sé Wendy, sólo que aún no lo asimilo, olvidó nuestra cita, ni un mensaje envío para cancelar

—Ella debe tener una explicación, podrías escucharla y...

—No Wendy, si quisiera darme una explicación ya hubiera hecho algo para solucionarlo, no le interesa Y tampoco a mi me interesa escuchar una explicación que muy probablemente este hecha de mentiras —A quien engaño, quería saber los motivos de Irene al dejarme plantada —¿pedimos un taxi para volver? Te dije que era mejor que tarjera el auto

—Lo siento, pero quería que caminaras, anda pidelo