BLUE LEMONADE || SEULRENE

~38~ Epílogo

Narrador

Años más tarde...

—¡Esa fue una increíble historia mami!—Dijo la pequeña de seis años, SooJin.

—¿Les gustó la historia?

—¡Sí! ¡Me gustó mucho!— Comentó la menor de la familia, la pequeña de cuatro años, SooRim.

—Entonces, Conociste a mamá... ¿Por una limonada?—Cuestionó la mayor de las niñas

—Digamos que gracias a ese pequeño incidente en la cafetería, su madre y yo ahora estamos aquí, como una familia.

—Vaya, ahora sé por qué les gusta tanto la limonada.

—Bueno niñas, es hora de que vayan a la cama.—Dijo Seulgi levantándose de la cama.

—Noooo, cuéntanos más, por favor —Dijo SooJin

—No, lo siento. Será mañana, ya es tarde y si su madre ve que aún no están dormidas me  matará.

—Ouh... Está bien...— Ambas niñas se dispusieron a cambiarse de ropa ocupando sus respectivas pijamas.

—¿Está todo bien?—Irene entraba a la habitación.

—Si, todo bien. Las niñas están poniéndose su pijama y lavandose los dientes. ¿Cómo te fue?—Preguntó Seulgi mientras se acercaba a ella tomándola de la cintura

—Bien, ya sabes cómo son de exigentes en el bufet y los clientes ni se digan. —Rodeó el cuello de la más alta con sus finos brazos. —¿De que hablabas con las niñas?

—¿En verdad quieres saberlo?—La menor besó la punta de la nariz de la más baja.

—Por supuesto que quiero saberlo, son mis hijas, tu mi esposa y yo también merezco estar en la misma sintonía que ustedes— Comentó mientras que su mano bajaba del cuello de Seulgi hasta su pecho.

—¡Aham!— Entraban las pequeñas observando con los ojos entrecerrados a sus madres.

—¿Interrumpimos algo?— Preguntó SooJin

Las dos mujeres se soltaron rápidamente mientras que en sus rostros había ese sonrojo que años atrás había desaparecido. Se sentían tímidas cuando sus hijas las descubrían en su burbuja de amor.

—No, no interrumpen nada. Su mami Irene preguntaba sobre lo que estuvimos hablando, ¿Quieren hacerme el favor de decirle que fué lo que comentamos?

—Mamá Gigi nos estaba contando la historia de cómo tú y ella se conocieron, ¿Es verdad que fue gracias a una Limonada?

—Así es, mi pequeña, una limonada pero hey, no era cualquier limonada, esa era única, Cuando el verano llegaba a la universidad sacaban su famosa limonada azúl. —Respondió la mayor.

—Eso no nos contó mamá Gigi —Ambas niñas voltearon a ver a Seulgi fulminandola con la mirada. Haciendo ese gesto parecían dos Irene en versión mini... O bueno, versión infantil.

— Sí, lo siento niñas, se me pasó ese pequeño detalle.

—El verano está cerca, así que... ¿Les gustaría probar esa famosa limonada? —Cuestionó Irene a las menores.

—¡Sí!