Una loca realidad (Oliver Sykes)

Capítulo 4. Ganando la felicidad

Terminamos de comer, la verdad, los omelettes habían quedado deliciosos.

Llevamos los platos al lavaplatos, apagamos el radio y después nos fuimos a la sala.

- ¿Qué haremos en una hora y media?.- Dijo Val mientras se acostaba en el sofá.

- Pues, podríamos ver una serie o una película.- Propuse.

- ¿Podemos ver Suicide Room?.- me vio con ojos tiernos.

Me le quede viendo unos segundos, le regalé una sonrisa y ella se emocionó.

Acomodamos el sofá para que quedara "tipo cama" después, fui a hacer unas palomitas y regresé a la sala. Seguido de eso, pusimos la película.

El tiempo se pasó volando, no sé en qué momento el reloj marcaba las 5:25pm, creí que solo habían pasado 5 minutos.

Pausamos la película ya que ésta duraba 2 horas y prendí el radio que tenía en mi celular.

Dieron las 5:30pm, el momento de la verdad, en estos momentos se definiría si mi sueño se cumple o no.

El programa empezó, el locutor se le oía emocionado.

- ¡Buena tarde querido publico!, Quiero informarles a todos los que participaron en la dinámica para ganar una experiencia exclusiva con la banda británica "bring me the horizon" que justamente aquí tengo el nombre del o la ganadora, no sin antes, agradecerles por todos los correos que enviaron, ¡son lo máximo!

- ¡Ya diga el maldito nombre!.- Val comenzó a desesperarse.

Solté risitas, me gustaba ver cómo se desesperaba.

-... El o la ganadora es... Una chica... ¡Alice Hartzel!, Eres la afortunada ganadora de esta experiencia para tí y un acompañante, ¡Muchas felicidades!, Nos pondremos en contacto contigo.

Apague el radio, un silencio inundó la sala, bastaron unos minutos para que mis ojos empezaran a soltar lágrimas.

Val se me quedaba viendo esperando alguna reacción.

- Ga...né el... concurso, ¡NO PUEDE SER!, ¡CONOCERÉ A LOS CHICOS!.- en ese momento, rompí en llanto y mi amiga me abrazó.

En serio no lo podía creer, mi sueño de hace muchos años por fin se hará realidad, mi mente aún está es shock.

Correspondí al abrazo de Val, ella me daba palmadas en mi espalda.

- Te lo dije, tú tenías que ser la ganadora, muchas felicidades Ali.

- Gracias a tí por ayudarme a ganar está gran experiencia que obviamente vivirás conmigo.

- ¡Eso es más emocionante!, ¡Podré abrazar a mi vegano!

- ¡Claro que sí!

Revisé mi correo y ví que me habían mandado un correo toda la información que necesitaba para acudir a la experiencia.

Imprimí lo que me pedían, sí que eran muchas cosas, no sé porque piden demasiado.

Cayó la noche, Val se había ido, al quedarme sola subí a mi cuarto y decidí llamarle a Simón para contarle todo lo que sucedió en esa mágica tarde.

- Deberías de agradecérmelo, hice un ritual para que ganaras.- dijo en un tono serio a través de la bocina del teléfono.

- ¡Uy si, cómo no!

Se escuchó que soltó una carcajada.

- Ay Alice, pues me alegro mucho de tí, espero que Valery y tú se la pasen genial, prométeme que lo disfrutarán al máximo.

- Gracias Simón y sí, te prometo que lo haremos.

- Está bien, bueno, tengo que colgar, tengo que ir a cenar, nos vemos mañana Ali, descansa.

- Okey, hasta mañana, descansa.

Colgamos al mismo tiempo, es una costumbre que tenemos.

Al no tener tarea, me puse a organizar  todas las cosas que iba a llevar a la experiencia, sé que faltan unos días pero, es mejor tener todo listo para no estar buscando todo a la mera hora.

También me sobró tiempo para hacer la cena, sabía que mis padres llegarían agotados de su trabajo.

Cuando dieron las 7:30pm, escuché el carro de mis padres.

Dejaron algunas cuantas cosas en la cocina, después pasamos a cenar.
Les serví la cena. Se quedaron asombrados porque es rara la vez que hago de comer.

En el transcurso de la cena, les iba relatando lo maravilloso que fue el día de hoy.
Me felicitaron y se alegraron mucho, a ellos les gusta verme feliz, más cuando se trata de cumplir alguno de mis sueños.

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Cada día se pasaba tan rápido, parecía como si 24 horas fueran tan solo 30 minutos.

Me alegra que pase tan rápido el tiempo, pero, esto también me afecta un poco ya que casi no me puedo concentrar en la escuela. De hecho, bajé un poco mis calificaciones y mi padre se enojó conmigo, ¡Casi me quedaba sin ir al evento!

Pero por suerte, pude convencerlo de que mis calificaciones volverían a subir, eso no me costaba mucho trabajo, solo tenía que ser más atenta.

Pero también en el transcurso de estos días me han pasado cosas extrañas; cada noche, antes de dormir imagino como será ese día, cómo es que hablaré con los chicos o que haré estando delante de ellos.

Pasan tantos pensamientos emocionantes por mi mente a tal grado de que me den "ataques de felicidad". Esto causa que me sienta con falta de oxígeno, tenga temblores o escalofríos y varias veces me palpite muy rápido el corazón.

No le comenté nada a mis amigos, mucho menos a mis padres, no me gustaría verlos preocupados por lo que me pasa, soy muy sentimental y no me agradaría que se sintieran así por mí, así que mejor preferí dejar esto en secreto.

Aunque, no me preocupa mucho estás acciones, ya que sabía cómo controlarme.

Lo que más temo es que me llegue a pasar algo así ese día y no tenga ni la más remota idea de cómo controlarme... Espero que no suceda.