me place

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Esperar el momento de separación entre la carne y la consciencia, en donde las superficialidades se hacen cartas puestas sobre la mesa en donde se juega la estabilidad de la misma.

Esperar el reloj roto que hace perder la constancia del tiempo, sin poder observar las palmas entre las luz roja.

Esto es un problema, que marea por las noches mientras los agudos solo suenan en sueños, la obsesión nuevamente me llena los oídos de palabras inpronunciables que nadie quiere oír.

Hacer daño como único propósito y como única razón de existencia, como origen y como causa de muerte.

Ojalá perder toda conexión entre aquí y allá, ojalá no pertenecer a ninguna carne.

Me place sin concepto.

pienso en tu miráDonde viven las historias. Descúbrelo ahora