Sin narrador
Los 4 miraron desafiantes al juego, todos esperaron a otro para comenzar. Después de un breve silencio que se sintió como años para los miembros de la banda , el mayor decidió romper el silencio.
-Pues hay dos opciones para comenzar-explicó titubeante sin mirar a nadie en concreto- Probar a ver qué sale o...llamar a alguien en concreto.
El silencio volvió a llenar toda la habitación, dándole un toque más tenebroso a las velas que iluminaban ferozmente una pequeña parte del lugar.
-John-murmuró el batería dudando si continuar. El menor alzó la cabeza mirando fijamente al que le había llamado.
Nervioso trago saliva un par de veces y al darse cuenta de que todos sus amigos esperaban ansiosos que continuará se obligó a proseguir.
-Podríamos llamar a tu padre...- inmediatamente el de ojos grisáceos apartó la mirada tenso sin contestar-no te preocupes... Es solo por llamar a alguien que... Si lo consiguieramos, sea alguien bueno, no un demonio. Y ya de paso que te pudieras despedir de el como es debido.-se despeinó nervioso sus largos cabellos mientras intentaba ver los ojos del bajista-si te parece bien, claro. Solo era una idea.
El silencio no era nada cómodo está vez. La tensión se palpaba claramente por toda la habitación. El cantante lanzó una mirada indignada al batería y el guitarrista se limitó a suspirar disgustado por el acto del rubio. El padre de John había muerto cuando éste tenía tan solo 11 años. El castaño apenas les había hablado de él, ya que no le gustaba tocar el tema. Sabían que trabajaba en una compañía de seguros y poco más.
-Está bien-era apenas un susurro, pero a causa del profundo silencio siendo roto por esas únicas dos palabras, se oyó claramente.
Sus amigos salieron de sus pensamientos al momento algo incrédulos.
-¿¿Qué has dicho??-preguntó el persa dudando de haberle escuchado bien.
-ESTÁ BIEN-exclamó el menor algo irritado de tener que repetir esas dos palabras que en el fondo significaban un montón de cosas para él.-Vale...Vale-repitió el ojiazul ahora más firmemente intentando ignorar el ligero miedo que le empezaba a carcomer por dentro ahora que estaban a punto de jugar. Por algún razón tenía un muy mal presentimiento sobre este tablero.-Primero, tenemos que darnos las manos -comenzó a explicar con voz neutra alargando sus manos para coger la de sus compañeros. -Ahora cerramos los ojos. Y... Se respira profundamente tres veces. -sus amigos lo hicieron y a continuación el los siguió, así calmandose algo también.
-Unos consejos, ya que esta es nuestra primera vez de todos-murmuró el azabache jugando con su cabello, algo que hacia cuando estaba nervioso- Intentar no enfadarse. Si el espíritu de... Tu padre-dijó mirando a John- si es que es el , claro está. Bueno, si él no responde alguna pregunta, es mejor no repetirla, no hay que obligarles a responder.
Todos asintieron mientras el mayor se mordía fuertemente sin darse cuenta el labio inferior. Salieron pequeñas gotas rojizas que al momento apartó delicadamente con una de sus manos.
-Por último, no hay que convertir en una obsesión lo que diga el tablero. No podemos perder el rumbo de nuestra vida por lo que diga está tabla.
Todos asintieron aún sin soltarse las manos. El primero en dar el siguiente paso fue el batería colocando su dedo índice en el indicador. Los siguientes le imitaron y así el rubio empezó a llamar al padre de John.
-Arthur Henry Deacon ... Arthur Henry Deacon-pasaron unos segundos. No pasaba nada. John no sabía si sentirse tranquilo o decepcionado.
¿Alguna vez podría despedirse de su padre? Era la pregunta que le rondaba por la mente insistidoramente.
-¿Hay alguien ahí? -continuó el segundo más joven.
Nada se había movido. NADA. Pero el menor notaba algo, como una lejana presencia acercándose sigilosamente. Algo malo. No parecía su padre. Pero a la misma vez sí. Como una sombra Algo extraño, no lo podría describir con palabras. Lo que fuera se acercaba de alguna forma . Sentía como si estuviera atrapado en algo. Desprendía algo aterrador, algo peligroso... Pero atrayente.
Las llamas de las dos velas se alzaron poderosas, iluminando la habitación al completo.
-Será el viento-murmuró Brian intentando nombrar al extraño hecho con algo mínimamente lógico.
Entonces la palabra Hello quedó señalada llevándose olvidadas las anteriores palabras del rizado . Todos se estremecieron ligeramente no sabiendo que pensar.
Roger miró al hijo del supuesto espíritu que había respondido a su llamada. Miraba algo nervioso el tablero aunque muy curioso y absorto en el juego. Quizás demasiado. Volvió a desviar la mirada hacia la tabla. Su intención había sido hacer unas pequeñas trampas para ganar algo de dinero antes, ahora en principio ganaría dinero sin necesidad de ellas. Pero en aquel momento el dinero no le importó lo más mínimo. Su mal presentimiento crecía por momentos. Se obligó a apartar esos pensamientos de su mente otra vez.
-¿Eres Arthur Henry Deacon?
la siguiente parte ya si que serán las preguntas jajaj. Si digo algo mal sobre el juego me harías un gran favor corrigiendome, nunca he jugado y tampoco tengo la intención de hacerlo. Lo que escribo sobre cómo se juega lo sé por películas o internet y no todo podría ser cierto.
Hasta pronto-L♥️
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Ghost(Queen/John Deacon)
Spiritual-Hola, Bulsara. ¿Qué quieres ahora?-preguntó John con una amplia sonrisa burlona no pareciéndose en lo más mínimo al John qué había sido su amigo. -Deaky, escúchame- -Te dijé que me dejarás de llamar así-gruñó acercándose al cantante con una mirada...