Enderezó la espalda.
La punzada fue descendente al presionar esa "zona" en específico.
Se inclinó al frente.
La punzada fue ascendente al soltar esa "zona" en específico.
Tieso, postura errática, intermedio exacto de incomodidad, apretó dientes y frunció el ceño aguantando un quejido.
En la serenidad extraña de la ciudad portuaria a mediodía, el débil sonido se esparció por la habitación alterando a los concentrados en su trabajo, o en la divagación profunda y desinteresada de sus deberes, cual habría sido su caso cualquier otro día. Otro día, no ese, y menos al atraer las miradas de los agentes de las Agencia de Detectives Armados, que curiosos se desviaron de sus obligaciones, yendo en cascada a su persona.
La rigidez aumentó en sus músculos en acto reflejo a la atención no deseada, esa que su grandioso ingenio eludió elaborando un perfecto plan de movimientos minuciosos y bien calculados, y que su humanidad traicionera no logró ejecutar. La disparidad entre la ficción desesperada y la cruenta realidad.
—Dazai-san, ¿está bien? —Atsushi, oportuno como sólo él, liberó el maremoto.
Kunikida, comprensivo por naturaleza, lo acusó de vago, incompetente y un ser de hábitos dudosos que no iba a escaquearse de sus responsabilidades, por una lesión de borrachera.
Yosano, sutil y amable, apuntó a su excelente condición física y alimentación, que debía colocar su edad metabólica en una cifra por encima de su edad cronológica, reduciendo su esperanza de vida y acelerando la presencia de achaques nada juveniles, concluyendo la diatriba con una felicitación por su sublime ejecución de un suicidio a largo plazo.
Kenji, discreto, lo llamó abuelo de tantas formas que ni siquiera pudo contarlas, dándole palmadas que lo clavaron de cara al escritorio, rogando una muerte pronta.
Haruno le ofreció un té verde para palear los estragos del exceso, apoyando inocente, sin pensarlo, a Kunikida y Yosano.
Tanizaki no tuvo gran participación, eclipsado por los toqueteos de Naomi quien, en cambio, no se mordió la lengua al alabar la maravillosa complexión de su hermano, y medidas que ni Dazai quiso saber cómo es que conocía; en comparación a "su escuálida persona".
Con semejante fiesta de reproches y diversión a su costa, no supo si debía sentirse feliz por la ignorancia de la verdad, o triste al confirmar el nada amable concepto en que lo tenían.
—El trasero —interrumpió Rampo desde su sitio.
La inesperada palabra dicha por el detective más grande de Japón, forzó un silencio que se atestó de la confusión ajena, acentuado al asomar su rostro por un costado de la caja de galletas encima del escritorio, las gafas luciendo sobre el puente de su nariz.
La ultra deducción.
—¿El trasero? —volvió a cuestionar atinadamente Atsushi.
Rampo se enderezó. Su mirada maliciosa disfrutando del ruego de Dazai.
—El trasero —repitió, saboreando el miedo en el rostro del ex mafioso, y la duda popular en aumento—. Dazai no está enfermo, tampoco herido, y pese a lo que crean, el hombre ha sentado cabeza.
En boca de cualquier otro tal afirmación habría devenido en una carcajada general. Al decirlo Rampo, el ambiente osciló entre la preocupación y el estupor.
—Lo insólito es con quién y cómo.
Dazai intentó colocarse en pie, emitir un "¡alto!" a todo pulmón, y el resultado fue... ninguno. El dolor lo sometió y lo pegó al asiento, a merced de un triunfante Rampo y su venganza por el último robo de dulces.
—¿Quién diría que Dazai terminaría saliendo con Akutagawa Ryunosuke y que, encima, en su primera vez le tocaría abajo? —la bomba estalló con una sonrisa triunfante—, el amor sí que te pone patas arriba, y a los mujeriegos contra la almohada.
Las orejas de Dazai, la única parte visible de la cabeza pegada al escritorio, se pusieron tan rojas que Yosano se preocupó, y enseguida se unió de buen agrado al coro de risas en las oficinas de la ADA. Pese al conflicto que significaba la relación entre un agente y un mafioso, era imposible ignorar lo divertido de ver avergonzado a Osamu Dazai, el Don Juan, y lo mucho que disfrutarían molestarlo en adelante.

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Esperanza
FanfictionReivindicación, redención y renacimiento, coloreados de lo que creyeron nunca merecer para ellos. Colección de Drabbles y One Shot. Fandom: Bungo Stray Dogs / Shipp: Dazai x Akutagawa