Fotografía.
Tomé mi cámara y busqué el mejor ángulo para tomarle una foto a una flor; tenía que verse su delicadeza y hermosura, nada la bebía opacar así que desenfoque el fondo a fin de que la flor sea lo único que resaltase.
Indudablemente mis pensamientos se asociaron con Jisoo, ella era delicada y no por que yo había tratado con ella; sino por que desde lejos veías lo delicada, hermosa y lo pura que era.
Oh Jisoo no puedes ser tan perfecta.
Como si mis pensamientos la hubieran llamado ella apareció con su bella y deslumbrante sonrisa de ángel, su risa contagiosa llegó a mis oídos llenándolos como si fuera música logrando que yo sonriera. Por impulso levanté mi cámara a su dirección y le tomé una foto en donde ella salía sonriente y con los ojos en una fina línea.
Muy acosador de mí parte, lo sé.
La examiné y me sonreí más al ver el bello resultado; la naturaleza es hermosa pero al lado de Jisoo se queda extremadamente corta.
Pestañe varias veces al darme cuenta de que si alguien me viera se formaría un problema y podría ir a la cárcel –pura exageración, creo–, guardé la cámara y me encaminé a mi casillero con el corazón en la mano.
Estoy totalmente loca.