Capítulo 10 - Capítulo Final

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Dos años después

La mujer en la calle se debatía en sí entrar o no al restaurante que tenía frente a ella. El restaurante es famoso por la deliciosa comida que ofrece, es Colombia en un rincón, para personas como ella que han dejado su patria atrás es reconfortante encontrar un lugar así. Hace un mes el New York Times escribió un artículo sobre este lugar, en el resaltaban la comida y el ambiente familiar que es propio del restaurante, pero lo más importante fue la historia de la propietaria, su llegada al país, los obstáculos que tuvo que sortear para alcanzar sus sueños, además de ser fuente de empleo para muchos inmigrantes con su restaurante, la mujer fue catalogada como la chica diez, al final del artículo salía una foto de ella junto a su familia, la mujer está casada con una hermosa doctora y tienen una bella hija.
Finalmente la mujer se animó a entrar y fue recibida con un delicioso aroma a galletas recién horneadas, ese olor le trajo recuerdos del pasado, cuando en ese piso barato donde vivió años atrás su novia preparaba las mismas galletas para ella, de vainilla con chispas de chocolate.
Se acerco hasta donde estaba la mujer del reportaje, espero hasta que terminó de organizar las galletas para hablarle.
- Hola Tatiana cómo estás?
Decir que la chica se sorprendió sería poco, prácticamente parecía una estatua de lo tiesa que estaba.
- Laurent que haces aquí?
- Quería hablar contigo, respondió Laurent con vergüenza, había lastimado mucho a Tatiana y francamente había esperado ser echada a patadas cuando la reconociera.
- Bien te escucho, respondió Tatiana muy tranquila, ella siempre había sido así, no le gusta pelear, le gusta escuchar.
- Yo fui una completa idiota contigo y con nuestra hija, le dije
- Isabella no es tu hija Laurent, ella tiene dos madres pero ninguna de ellas eres tú, me dice con dolor y se que tiene razón. Tú sólo compraste el esperma y ya, nunca te preocupaste por mi y menos por Isabella.
- Lo sé Tatiana, se que tienes razón en todo y por eso quiero pedirte perdón.
- Y qué te motivo hacerlo después de tanto tiempo, así es Tatiana siempre indagando y preguntando por el por qué de las cosas.
- Sabes mi "creciente" carrera se detuvo, tuve uno o dos papeles importantes y luego nada y todas las personas que supuestamente me querían y apoyaban desaparecieron, cuando me quedé sola me puse a pensar que hace rato me sentía así sola y llegue a la conclusión que el único lapso de mi vida en el cual no me sentí así fue cuando estaba contigo. Fue ahí cuando me di cuenta de lo que hice y cuanto la cague contigo, tu me apoyaste cuando nadie más lo hizo, creíste en mi y estuviste durante todas mis vacas flacas y yo cómo te pague: te abandone, no respondí por Isabella y hasta te denuncie a inmigración.
- Si esperas que te corrija y te diga que en realidad no fuiste tan mala, no la haré porque te portaste como la peor perra de todas, Tatiana me mira directo a los ojos y continúa. Y te odie Laurent no sabes en cuanto, en especial cuando te llame esa noche y no te importó que la vida de Isabella estuviera en riesgo. Pero luego tuve que agradecerte porque todo lo que hiciste permitió que Sofí llegará a mi vida y ella junto con Isabella son el regalo más hermoso que la vida me ha podido dar.
Laurent noto como le brillaban los ojos a Tatiana al hablar de su esposa, realmente la ama pensó pero no dijo nada, Tatiana había sido su novia y sabía que ella la había amado mucho pero ella no lo valoro y ahora su dulce Tati se enamoró de otra.
- Tu amas a tu esposa? Creí que te habías casado solo por no ser deportada.
Laurent había visto la fecha del enlace, ya que la doctora Reynolds era un personaje importante de la sociedad norteamericana, su boda fue motivo de portadas en muchas revistas, cuando se enteró del enlace no le dio mucha importancia porque en esos momentos estaba seducida por la fama y el poder, además pensó que Tatiana sólo se había casado por necesidad no creyó que amara a alguien más que no fuera ella. Pero ahora al escuchar hablar a Tatiana con tanto amor y devoción de su esposa, sintió celos y su corazón se aferra aún a que ella sólo sienta agradecimiento por la doctora no amor, por eso hizo la pregunta aunque Tatiana aún no responde.
- No te voy a mentir, al principio me casé con Sofí por conveniencia además creía que la odiaba por un incidente que habíamos tenido, pero poco a poco me fui enamorando de ella, Sofí supo ganar mi corazón, con sus detalles, sus preocupaciones, la manera de tratarme tan amable tan suave, además me hizo sentir segura en sus brazos, me hizo sentir amada.
La declaración y la mirada de Tatiana lo confirmaron todo, Tatiana está perdidamente enamorada de su esposa y eso a Laurent le dolió y no tiene derecho a decir o reclamar nada porque ella con su forma egoísta de ser y de tratar a Tatiana provocó todo esto.
Durante unos minutos ninguna fue capaz de hablar, cuando salieron de Colombia en busca del sueño americano sin duda ninguna de las dos imagino que terminarían así, aunque Laurent reconocía que Tatiana hizo todo para que la relación funcionará aquí la única que falló fue ella.
La puerta del restaurante se abrió anunciando otro visitante, el lugar estaba lleno de personas y no paraban de llegar más.
- Mamá ya llegue, Laurent se quedó viendo a la pequeña de hermosos rizos dorados que se lanzaba a los brazos de su madre llena de felicidad, le dio un beso en la mejilla a su madre y está le dio una galleta de otra bandeja que al parecer no tienen chispas de chocolate.
- Cómo te fue hoy mi niña? Tatiana miraba a su hija con tanto amor, que parecía casi palpable el sentimiento
- Me fue muy bien mamá, practicamos las combinaciones para aprender a leer correctamente, la niña le dio un mordisco a su galleta. Pero como mi mami ya me enseñó a leer me la he pasado jugando.
- Cómo que jugando Isabella?
- Pues si mamá, no tenía nada más que hacer, la profesora ha sugerido adelantarme de año, pero mejor hablas con mi mami ya sabes que ella explica las cosas mejor.
- Y dónde está tu mami?
- Esta afuera, le entró una llamada del hospital y está hablando por teléfono, pero me dijo que me adelantará a saludarte, la niña le dio el último mordisco a la galleta y su madre le pasó un vaso de leche. Laurent miraba la escena deslumbrada por la inteligencia y la ternura de Isabella, pero también sintió dolor porque gracias a ella misma la niña ni la reconocía, era una completa extraña para ella. Isabella miro a la mujer que estaba sentada a su lado y se recordó que no la había saludado, su Mami Sofí le enseñó que las personas educadas siempre saludan.
- Me llamo Isabella Reynolds y tengo cinco años, le pido disculpas por no haberla saludado antes.
Isabella extendió su mano derecha para saludar a la desconocida.
- Yo soy Laurent Ortiz, es un gusto conocerte Isabella y no te preocupes por no saludarme antes a todos nos pasa alguna vez.
La niña sonrió, luego comenzó a dar palmas de felicidad cuando vio a su Mami Sofí entrar.
- Dónde están mis dos tesoros más preciados sin los cuales no se vivir?
- Aquí estamos Mami, aquí estamos, respondió una Isabella muy emocionada.
La doctora Reynolds levantó a su hija en brazos y comenzó a dar vueltas con ella, Laurent noto como los comensales parecían encantados con la escena entre madre e hija.
- Ocurrió alguna emergencia de última hora? Pregunto Tatiana acercándose a su esposa
- No sólo es un caso nuevo que llegó hoy al hospital y los padres quieren que yo lo atienda personalmente pero me reuniré con ellos mañana, hoy voy aprovechar para estudiar el caso y presentarles posibles soluciones mañana.
- Eres la mejor pediatra cariño, yo también querría que tu atendieras a mi hijo.
- Eres tan dulce mi amor, ven aquí y dame un beso.
- Voy corriendo
La doctora Reynolds beso a Tatiana con verdadera pasión y está la dejo saquear su boca con total libertad, un suspiro de amor se escucho en todo el restaurante. Laurent sintió su corazón romperse completamente, abandonó el lugar en silencio, dejando atrás a la única familia que había tenido y a la cual perdió, tuvo la felicidad frente a ella todo el tiempo y no se dio cuenta sino cuando fue demasiado tarde y ya no había manera de recuperarlas.


...

- Sabes que Isabella me dijo que quiere ser doctora. Sofí le dijo llena de orgullo a su esposa mientras se retiraban a su habitación. Isabella acababa de quedarse dormida después de jugar un rato a guerra de almohadas.
- Y tú debes de estar que no te cambias por nadie. Tatiana quería aparentar mal humor porque Isabella quisiera ser doctora en lugar de chef como ella. Sofí la miraba divertida.
- Pero hay algo más que me dijo
- Qué cosa? Pregunto Tatiana soltándose el cabello. Sofí mojo sus bragas al instante, su mujer la mantenía en estado constantemente y más cuando suelta ese cabello rebelde que tiene.
- Que quiere ser doctora pero que también quiere ser chef para dar de comer a sus pacientes mientras los cura.
- Esa es nuestra niña, Tatiana sonrió por los razonamientos de su hija
- Si, esa es nuestra Isabella siempre pensando en como hacer feliz a los demás.
Sofí se acercó para depositar un suave beso en los labios de su esposa, bajo las manos a su trasero y lo apretó, en ese momento el suave beso quedo atrás para convertirse en uno lleno de pasión.
- Quiero hacerte el amor nena, le dijo Sofí a su esposa con voz ronca.
- Y qué me darás a cambio? Pregunto Tatiana, le gustaba molestar con el motivo que las unió hace dos años
- Mi corazón y mi amor, respondió Sofí ya quitando el camisón a su esposa
- Me parece un buen trato doctora Reynolds, respondió Tatiana, abriendo los brazos para que Sofí pudiera cubrirla con su cuerpo completamente.

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Hasta aquí llegó esta historia, espero les haya gustado, quiero agradecer a todas y todos por leer, votar y recomendar. Besos y abrazos desde Colombia.

 Besos y abrazos desde Colombia

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