Capitulo 15

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Nuevo capitulo :) Espero que os guste que de deis a me gusta y comentar me alegra mucho :)

CAPITULO 15

Nos quedamos en el pasillo esperando que salgan ya de la habitación, pero van pasando los minutos y nadie sale ni entra de la habitación ¿A pasado algo? Nos sentamos impacientes, sin saber respuestas. Me quedo mirando ese largo pasillo, lleno de gente en los bancos que al igual que nosotros están esperando a que les dejen entrar de nuevo en la habitación.

-Saul, tengo hambre. Voy a bajar a la maquina ¿Quieres algo de comer? -digo rozando su mano, para que me mire y me atienda. Que parece estar en otro planeta.

Niega con la cabeza.

Camino hacia las escaleras. Bajo y me dirijo hacia las maquinas que hay cerca de la entrada, las únicas que había visto en todo el hospital. Pongo un euro y saco un paquete de rosquilletas saladas. Lo abro mientras camino de nuevo para las escaleras de donde he venido. No tardo apenas unos segundos en llegar a ellas, las subo. Estoy subiendo las escaleras cuando empiezo a notar una pequeña vibración que viene desde mi móvil. Lo saco, y veo que es un mensaje de Leo.

-Laura tenemos que hablar del bebe que estas esperando. ¿Dónde podemos vernos? - pone en el mensaje.

Cojo aire, no se que contestar ¿Realmente puedo verlo? Sin morir de vergüenza. Empiezo a teclear y lo borro, vuelvo a escribir esta vez si lo mando. Le pongo "Estoy en el hospital, cerca de las maquinas". Me quedo esperando en la escaleras su respuesta. Al minuto llega su respuesta.

-Enseguida estoy allí - me pone en el mensaje.

Leo el mensaje, y vuelvo de nuevo a la entrada donde están las maquinas de comida. Me siento uno de los bancos que hay cerca de la entrada. Sigo comiendo las rosquilletas saladas. Antes Leo siempre era amable conmigo me trataba como a su hermana, siempre cuidando que nadie me hiciera daño. Estoy esperando cuando recibo un mensaje de Saul.

-¿Vienes ya? ¿Dónde te has metido? Cariño - me pone en el mensaje. Empiezo a ponerme nerviosa, no quiero mentirle pero siento que me va a tocar hacerlo. Por su bien. Guardo el móvil, sin responderle, si no le respondo no estaré mintiéndolo, pienso.

No paro de dar vueltas si guardar el móvil, sin responder a sido la opción mas correcta ¿Y si se le ocurre bajar? Todas las malas situaciones que podían pasar, están apunto de pasar, siento. Necesitaba que Leo llegara ya y hablar con él, cuanto antes.

Los minutos se me hacían eternos, de repente siento un escalofrió. Cada vez hace mas frio allí. Me extraña ya que es un lugar cerrado, y no hay corrientes de aire por ningún lado. Miro hacia todos lados, me quedo enseguida pensando que estoy en buen sitio para hablar con Leo, si se me antoja un dulce podría cogerlo enseguida. Después de quince minutos veo entrar a Leo por la puerta principal. Se me queda mirando lo primero la bolsa de rosquilletas, ya vacía y casi toda rota. Por culpa de mis nervios, y del frio.

Levanto la mirada y enseguida veo que lleva una sudadera de Nike, combinado con unos pantalones largos con varios agujeros sobre las rodillas. Trago saliva, y me levanto del asiento, me acerco a él y le doy dos besos a modo de saludo. Un gesto muy Español.

-No he tardado mucho verdad - me dice él a modo de saludo - ¿Qué te pasa? Estas temblando.

-Hace mucho aquí -digo sin dejar de temblar.

Veo como vuelve acercarse a mi, y me da un abrazo como tantas veces. En ese momento siento una sensación super extraña. Ahora no podía verlo como un hermano o un amigo, sino como el chico con el que voy a tener un bebe.- Mejor subamos arriba -digo mirando de nuevo las escaleras que están no muy lejos de la entrada.

Vamos hacia las escaleras los dos en silencio, un silencio muy incomodo. Cerca de las escaleras nos sentamos en uno de los bancos, el uno al lado del otro. Saco mi móvil y le mando un mensaje a Saul - Me encontrado con Leo en las maquinas - le pongo en un mensaje de WhatsApp.

Enseguida veo que esta en linea, veo que empieza a escribir y me llega el mensaje donde pone : -Gordi, vuelve conmigo, no quiero estar solo en este momento, por favor.

Ese mensaje sonó a que estaba celoso, pero en aquel momento no me di cuenta de ese pequeño detalle.

-Lo siento cariño, pero tengo que hablar con el de Izan. Cuando acabe iré enseguida - le pongo mientras me guardo el móvil en el bolsillo derecho.

Leo se me queda mirándome extrañado.

-¿Izan? ¿Se va llamar Izan? - me dice mirando sorprendido.

-¿No te gusta? A mi me encanta.

-Quiero saber que va a pasar cuando tengas al bebe ¿Vas a volver a Castellón? - me pregunta muy descaradamente.

-Lo tenemos que decir Saul y yo - Yo sabia que nos queríamos quedar un año en Madrid hasta que mi hermano acabara el colegio ese año. Pero eso no pensaba decírselo a Leo.

-Yo quiero formar parte de la vida de él y ayudarte en todo lo que pueda, ir viendo como creciendo ese pequeño bebe dentro de ti - escucho que dice Leo.

-Seria extraño, Saul es el que hace ese papel ahora - digo mirando a Leo, que me mira con cara de corderito - Tengo que volver con Saul, hablamos en otro momentos donde no este tan ocupada.

Voy corriendo hacia la habitación de la madre de Saul. Veo enseguida que Saul no se encuentra en el pasillo. Empiezo a preocuparme, saco lo mas rápido que puedo el móvil del bolsillo y empiezo a llamarlo. Pero solo da noto, pero no hay respuesta de nadie al otro lado del móvil, Empiezo a caminar por los pasillos mientras no dejo de llamarle muy preocupada. Solo me queda mandarle un WhatsApp que empiezo a escribir al ver que no hay respuestas de él.

Embarazada a los 18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora