Capítulo 6 - Mark y su pueblo Drune

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Era un nuevo dia en lo que había quedado del pueblo de Drune, se presentaba tenue y silencioso, así venía siendo desde  el desastre nuclear. Mark despertó tras padecer una pesadilla en la cual una intolerable oleada de polvo lo envolvía permitiéndole ver únicamente esa densa nube grisácea que lo rodeaba, tan parecido a como si caminara por un desierto y el suelo comenzará a tomar vida con la finalidad de tragalo vivo. Sus manos sudaban como era habitual luego de que despertara sobresaltado de ese sueño corrompedor el cual se repetía cada un breve periodo de tiempo. Dejó a un lado las mantas que lo cubrían y se semi incorporó sentándose en la cama, diciedose a sí mismo "extraño el mundo tal como era antes, extrañoa Maria, si pudieras estar aquí conmigo tan solo un dia". Mark persistía a través del tiempo en un mundo casi muerto quién sabe porque, tal vez no poseía el coraje de acabar con su vida tan fácilmente. Se consolaba suponiendo que su difunta esposa Maria no querría ese tan miserable destino para él, si bien lo había perdido todo, aun le permanecían intactos los recuerdos latentes de una vida pasada, "porque nunca se evapora todo, siempre queda algo haciendo de soporte para el corazón", se decía siempre en medio de su propia y por momentos compañera soledad. Al lateral de la cama se encontraba una taza de café completamente helado, que reposaba allí desde la noche anterior. El frío era absoluto y carente de piedad. Luego de dejar atrás ese momento de desorientación mental el cual le hacía mantener la vista perdida en algún rincón de la pieza, con cabeza gacha adquirió fuerzas afirmando sus manos en la vieja cama de roble para poder incorporarse vagamente. Aferró la tasa en sus manos y decidió encender un fuego enla pequeña estufa, debía resucitar ese resto de café inmediatamente.Se hallaba cansado, como derrotado por la vida misma y sentía sucuerpo entumecido. El rechinar de las leñas secas era placentero al oído y la calidez del fuego ardiente a su cuerpo helado, pero ni un poco cercano a ser vencedor de esa temperatura gélida y mortal.

El susurro del viento cada vez mas enfurecido estaba quedando superpuesto al silencio perpetuo que reinaba sobre el dia. Los escasosrayos de luz que penetraban entre las tablas que bloqueaban lasventanas se mostraban cada vez mas debilitados a raíz de unas grisáceas y casi oscuras nubes que invadian el cielo, haciendo de un día silencioso y luminoso uno susurrador y tenue. Comenzaba a ser estremecedor el agudo sonido de los objetos metálicos golpeándose entre sí en el exterior a causa del violento vendaval que se había instalado en Drune. La sonoridad del ventarrón creaba un leve eco en el interior de la pequeña casa de hormigón, el cual junto con el crujido de la madera seca carbonizandose lentamente y la oscuridad que invadía el lugar, ilustraban un aspecto lúgubre en el fondo del alma de Mark. El fuego había dado vida a aquel café y sus ojos se veían brillosos a causa de las vitales llamas que flameaban de entre las leñas y el liviano humo del café que se mantenía hirviente colisionaba contra su rostro melancólico y cansado pero asu vez pensativo.

Varias chapas de zinc, un par de manubrios de Harley Davidson, varias ruedas de esta misma marca, tablas en mal estado, herramientas viejas, recipientes de gasolina vacíos y varias otras cosas que ya no tenían casi ninguna utilidad se encontraban dispersas por el jardincito frontal. El jardín no era mas que solida tierra cuarteada que se volvía de hormigón debido a los ida y vuelta de Mark, a todas las chatarras que amontonaba, y a las labores que quien sabe que loco como Mark pudiera realizar hasta largas horas de la tarde al intemperie, dejando como resultado algo mas parecido a un vertedero de desperdicios metálicos a lo que en viejos tiempos era el ostentoso jardin de Maria, el del césped distinguido de los demás jardines, tan rutilante como cegador, repleto de coloridos crisantemos que amontonados como si se dijeran cosas al oído formaban un auténtico arcoíris de cientos de pétalos.

Nuevos capítulos cada Martes. Próximo capítulo: Martes 28 de Mayo. 

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