ɴᴏᴛ ɴᴏʀᴍᴀʟ|Cole Mackenzie

Cero Tree

Llegué a mi casa a paso lento, abrí y cerré la puerta despacio para que mi madre no escuche, cuando me di vuelta estaba ahí, mi madre ahí parada mirándome con desaprobación y superioridad, se acercó y desabrocho mi camisa despacio y a su tiempo.–¿Te ha visto alguien así?

–Solo el hijo de los Mackenzie.–Abrió los ojos como platos y le dio mi camisa a las criadas con una mueca que demostraba desagrado.

–Quiero que no le hables nunca más a ese niño, muchachito.–Dijo para darse la vuelta e ir a la sala para hacer sus pendientes.–No esta a tu nivel, ve a bañarte.‐Se asomo por ultima vez para luego irse.

Hice lo que me ordeno, y fui rápidamente a bañarme, esperando a que no me viera ninguna de las encargadas de mi casa. Después de bañarme me vestí formalmente, ya que mi madre había invitado a cenar a los Barry y a los Andrews, baje sin prisa pudiendo divisar la mesa de comedor desde las escaleras.

–Buenas noches.–Dije saludando mientras entraba al salón, me sente junto a Billy y le sonreí timidamente, mis padres siguieron hablando y yo simplemente me digne a esperar la cena, mientras miraba y observava de vez en cuando a Diana que charlaba con Prissy pasivamente, y de vez en cuando las dos miraban hacia mi direción con una mirada luminosa.

–¡Que lindo hijo que tienes Antonet!–Dijo mordiendo su labio inferior la Sra.Andrews.– ¡Y no hablemos de esas dos pequeñas!–Dijo para después mirar a mis dos hermanas que se encontraban hablando con Minnie.–Son identicas a ti Jeremy.

–Oh, ahora que lo dices tenes mucha razón querida.–Dijo el Sr.Andrews.

–Pero su hijo, no se parece demasiado a ustedes.–Mi madre se puso un poco nerviosa ante lo que dijo el Sr.Barry.

Después de esa pequeña conversación no preste más atención, comence a charlar sobre lo sucedido con Billy hasta que las criadas trajeron la comida y yo comence a comer, Billy me miró extralado ya que no comía el estofado que estaban comiendo ellos, es una larga historia, simplemente le dije que vomitaba cuando comía carne.

Al día siguiente amanecí con una sonrisa en mi rostro, bueno, no tenía razón tal vez era el que mis padres no estarían por dentro de dos días ya que decidieron darse un tiempo para ellos,  mis hermanas se fueron a la escuela antes que yo, creo que hoy entraban más temprano.

Me vestí tranquilamente mientras acomodaba mi corbata por debajo del sueter sin mangas, pues mi madre me había dejado esa vestimenta nueva en la silla de mi habitación. Al terminar tome mis libros y pizarra, junto a mi canasta y me dirigí a la escuela a paso lento. En parte estaba nervioso, porque ya no podría hablar con Cole.

Entré a la escuela con timidez y deje mis cosas, mi gorro también, me senté en mi lugar junto a Billy, y pude ver a una cara nueva que no habia visto, pude escuchar murmullos de las chicas diciendo "Gilbert Blythe ha vuelto" o cosas así.

–¿Cómo has estado?–Pude escuchar y miré a un costado pensando que me hablaban a mi, vi a Anne hablando con el supuestamente llamado Gilbert.

–Hey.–Vi como Billy se sentaba a mi lado con una sonrisa, vi como todos corrían y hablaban por ahí.–Estuvo deliciosa la cena de ayer.–Se estiró en la silla cerrando los ojos.

Asentí sentado de una forma algo defensiva, estaba cruzado de brazos mientras mi espalda estaba apoyando en el respaldo, adelanté se encontraba sentado Cole el cuál al parecer no notó mi presencia.-Diana es muy linda ¿no Ryan? Ví como te miraba parecía estar derritiéndose mientras comíamos el postre.-Reía sin importarle lo qué me había echo anteriormente.

-¿Te acuerdas qué rompiste mi camisa y me tiraste al lago no?-Le dije con una voz algo enojada.-Y sí Diana es muy linda.-Al decír aquellas últimas palabras yo me volví a acomodar y Cole al parecer también, ya qué se había movido de su lugar.

-Oh vamos Ryan, fue una prueba de amistad qué le hago a mis verdaderos amigos ¿o no chicos?-Miré hacia atrás y los dos muchachos asistieron, haciendo que me fastidie aún más, pero sin embargo tenía que ser si o si ser su amigo.-Aparte, te conviene demasiado ser mi amigo, porque tus papis son muy parecidos a los míos.-Tenía razón, debía ser más inteligente y no fastidiar a mis padres con otro disgusto.

-Bueno, pero no me rompas más la camisa ¿ok?-Diria girando levemente su cintura para sonreírle.

-Ya.-Reiria y comenzaríamos a jugar levemente a los golpes hasta que el profesor apareció.

La clase pasó lentamente, más lento que siempre, yo no podía dejar de mirar a Cole, estaba al frente mío y no me había mirado ni una vez en el día, eso me irritaba, y mucho. Billy pudo notar eso haciendo que yo pegué mi vista a la pizarra nuevamente copiando lo que escribía el profesor.

Perdón por tardarme tanto en escribir una nueva parte, estaba modo paja y bue.