Después de aquel día, todo marchaba perfectamente bien. Los chicos tenían cada vez más presentaciones en lugares más grandes, y el trabajo de su disco comenzaba a aparecer. Eso lo supe el día en el que Freddie llegó preguntando si todos tenían visa y Pasaporte.
Su Manager les había hecho una llamada, preguntando justamente eso, si todos contábamos con visa y pasaporte, lo cual, todos respondimos que sí. ¿Pero para qué?
—¡Nos Vamos De gira a Japón, Queridos!
La mandíbula de todos fue a parar directamente al suelo... Su sueño estaba despegando, y ellos junto con ese sueño.
Ese día pasó algo realmente mágico. Había felicidad por cualquier lado, en cualquier rincón de nuestra casa, y en cada uno de ellos.
Por la noche, John y yo Salimos a pasear cerca del Palacio. Me encanta ir a ese lugar... Me transmite paz y confianza.
Nos sentamos en una banca en un parque que estaba cerca de ahí, y nos quedamos mirando el cielo un buen rato, hasta que John Decidió Hablar.
—Tu Sabes lo que eres Para mí, ¿Verdad?
Lo miré, y le sonreí. —Espero que tú también sepas lo que eres para mí.
John se levantó y se arrodilló frente a mí. —Te amo Más que a cualquier otra persona en el mundo... — Metió su mano a su abrigo y sacó una cajita color rojo. —¿Te quieres Casar conmigo?
Abrió la cajita, la cual tenía un hermoso anillo dentro. No pude contener mi emoción y lo abracé fuertemente mientras asentía repetidas veces. —Si, ¡Si quiero!
Sentí su sonrisa y me besó la mejilla, para luego tomar mi mano y ponerme el anillo. —Te amo, y Te Amo demasiado...
Le acaricié tiernamente las mejillas. —Yo También a ti... Eres el Amor de mi Vida, y de eso, estoy completamente segura...
