LA TIERRA ESTÁ EN LÍNEA (地球 上 線)

Capítulo 117

Tang Mo bajó la cabeza y no habló.

... Había algo mal. ¡Debe haber algo mal!

El reloj de la verdad confinó a Tang Mo a un cuadrado de un metro. Simplemente se recostó contra la pared invisible y agachó la cabeza para pensar en el problema.

El televisor y la lámpara, la mesa y el arco largo.

Entre estos dos pares de elementos, una de las verdades que encontró fue errónea.

En este juego, Tang Mo comenzó a las 6 en punto y él era el Jugador 6. El conejo negro estaba a las 9 en punto y era el Jugador 0. Justo ahora, el reloj de la verdad decía:

"El jugador 0 ha avanzado una casilla y el jugador 6 ha retrocedido una casilla".

El reloj de la verdad decía que Tang Mo retrocedió una casilla.

Significaba que la dirección en la que se movía este reloj era en sentido contrario a las agujas del reloj. Ir en sentido contrario a las agujas del reloj era la manera de avanzar. Tang Mo acababa de moverse en el sentido de las agujas del reloj, lo que significaba que se había movido hacia atrás.

"Todos los elementos en el reloj de la verdad se limitan a una verdad común entre solo dos objetos, en otras palabras, hay una sola verdad". Tang Mo susurró para sí mismo.

Justo ahora, Tang Mo había retrocedido una casilla. Esto demostró que la verdad de cuatro de los seis elementos era incorrecta y solo la verdad de dos elementos era correcta. Entre ellos, Tang Mo no estaba muy seguro acerca de la lechuza y el tazón de sopa. Sin embargo, estaba confundido acerca de cuáles de los cuatro elementos restantes estaban equivocados.

Ya sea el televisor, la lámpara, la mesa y el arco, tal vez la verdad que encontró no fue la única verdad. Había otras verdades separadas entre estos dos objetos. No había duda de que lo que él encontró era definitivamente una verdad.

Tang Mo bajó la cabeza, con el rostro turbio e incierto.

Al final, dio un largo suspiro. "La verdad está determinada por la torre negra".

Sólo podría explicarse por esta respuesta.

Las verdades individuales que Tang Mo encontró no estaban equivocadas, pero podrían ser diferentes de la verdad reconocida por la torre negra. Si ese fuera el caso ...

Tang Mo miró fríamente al conejo negro.

El conejo negro estaba zumbando de alegría. La distancia entre él y Tang Mo se acortó. Sacudió su fuerte cuerpo con entusiasmo, canturreando una canción desconocida. Parecían muchos monstruos negros de torre que Tang Mo había visto, a los que les gustaba cantar canciones desafinadas y querían comer jugadores. Parecía estúpido y se provocaba fácilmente. Pero avanzó una casilla mientras que Tang Mo retrocedió una.

Tal vez fue porque el conejo negro era un monstruo negro de la torre. Tenía una mejor comprensión del juego del reloj de la verdad y sabía cómo pasar el juego. Esto hizo que Tang Mo le prestara más atención.

No podía subestimar a ningún oponente.

Tang Mo se metió las manos en los bolsillos y se frotó la moneda de oro en el bolsillo. No usaría la moneda de oro del rey hasta que tuviera que hacerlo.

Cinco minutos antes de que apareciera la siguiente ronda de artículos, Tang Mo, una vez más, se sentó en el suelo y miró al conejo negro. El conejo negro vio a Tang Mo sentado en el suelo y su boca se contrajo ligeramente. Resopló con desdén y se volvió para mirar en la otra dirección. Entonces Tang Mo preguntó a la ligera: "¿En qué te equivocaste?"