Hey, Mickey! {Sweet California}

Capítulo 10.

Andrea se frotó los ojos y se estiró en la cama. Abrió los ojos y se quedó mirando la habitación en la que estaba, un poco atontada, sin saber en qué sitio se encontraba.

Sonrió cuando se dio cuenta de que estaba en la habitación azul de Sonia, pero la peliazul no estaba allí.

Salió de la habitación y comenzó a recorrer el pasillo en la dirección equivocada. Al darse cuenta de que la sala de estar estaba en la otra dirección, And rió.

Cuando llegó al salón, la recibieron los aplausos de Iris y de Jade.

-¡La princesa durmiente se ha levantado!

Andrea sonrió de nuevo.

-Buenos días a vosotras también, chicas -rió-. ¿Dónde están las chicas?

Jade e Iris se miraron, encogiéndose de hombros después.

-No estaban cuando me he levantado -respondió Ir, que era la primera que se había levantado.

-Segundo día y ya han huido -bromeó Jade, que iba vestida con su gracioso pijama de cuerpo entero.

Estuvieron hablando un rato más, hasta que escucharon la puerta de la casa abrirse. Las tres se miraron. La primera en correr hacia el pasillo fue Jade, seguida por Andrea e Iris. En el recibidor estaban Sweet California, que llevaban bolsas de plástico en las manos. A juzgar por su cara, las bolsas pesaban.

-¡Buenos días! -exclamó Ro, mientras cerraba la puerta con llave.

-Perdonad si no estábamos, pero queríamos daros una sorpresa -explicó Sony.

-¡Os hemos traído chocolate con churros para desayunar! -anunció Alba, sacando una bolsa de papel llena de churros.

-¡OH, SÍ! -chilló Andrea, la más glotona del grupo, que amaba el chocolate y los churros.

-¡Muchas gracias! -exclamó Iris.

Ayudaron a Sweet con las bolsas, llevándolas a la enorme cocina. Allí, entre todas, prepararon varias tazas con chocolate y un gran plato lleno de churros calentitos.

-¿Habéis pasado buena noche? -preguntó Alba, dándole un mordisco al churro seguidamente.

Las invitadas asintieron, con la boca llena.

-Mejor. En unos días arranca la gira, y la vida en el bus no da mucho para dormir... -sonrió Sonia. Rocío corroboró sus palabras asintiendo con la cabeza.

-¿Habéis estado alguna vez por Madrid? -preguntó Ro.

Iris, Jade y And asintieron las tres con la cabeza. Las Sweet se miraron unas a otras e irrumpieron en carcajadas.

-Vaya fail. Pensábamos que nos ibais a responder que no -rió la rubia.

-Habíamos planeado en hacer una pequeña visita por el centro de Madrid -sonrió Sonia-. Seguramente ya lo habréis visto, pero no sabíamos qué demonios hacer y no queremos que os aburráis. ¿Os importa?

-¡Claro que no! Madrid es genial, no nos importa en absoluto -respondió Jade, apurando su chocolate.

-¡Genial! -sonrió la pelirrosa. Dicho esto, se levantó y llevó su taza al fregadero. Antes de irse, dijo-: Empezaré a prepararme. Cuando estemos todas, saldremos y empezaremos nuestra pequeña visita. Rocío, Sonia, tendremos que ir de incógnito... ya sabéis.

Tras guiñarles el ojo, salió de la cocina y se perdió por el pasillo.

-Oh, no, de incógnito no... -protestó Rocío, escondiendo la cara entre las manos.

-¡Oh, Ro, será divertido! -exclamó Sonia, sonriendo.

Iris paseó la mirada de Jade a Andrea, preguntándose a qué demonios se referían las chicas con la palabra <<incógnito>>.