Attention || Hero Fiennes-Tiffin

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Chicxs por favor no sean lectores fantasma, me gustaría saber si les está gustando o no el fic. ❤️

Bufo y lo sigo por el pasillo, tomo su brazo y lo hago voltearse a verme.

-Hero, no es lo que crees - intento remediarlo, metí la pata y muy adentro.

-¿No es lo que creo qué? Lena te escuché gritarle cosas horrendas a esa chica - su expresión es neutra.

-Lo sé, pero...

-No hay un pero, pensé que eras diferente Lena...En serio comenzabas a gus... A agradarme - se da vuelta y se va, soy una completa idiota.

Se que la traté muy mal pero de cierta manera se lo merecía. Estoy apunto de perseguirlo nuevamente para intentar explicarle pero escucho las voces de Julián y la chica dentro de la habitación, ¿riendo?

Me acerco a la puerta y confirmo mi duda.

-Te dije que reaccionaría así - dice la chica riendo.

-Hasta la corriste de tu casa - suelta una carcajada y mi sangre comienza a hervir.

Abro la puerta y ambos me miran sorprendidos.

-Los odio - les grito.

-Oye tranquila, el chico merecía saber quién eres realmente - dice Julián tranquilo.

-Así que, ¿que el escuchara no fue una coincidencia?

-Claro que no, pero estabas tan cegada siendo la tonta que eres que ni siquiera te diste cuenta - sonríe victoriosa y mis ganas de reventarle el rostro aumentan.

-Ambos sabrán el error que acaban de cometer y se van a arrepentir hasta el último día de sus vidas - les advierto y salgo que me lleva el diablo de la habitación, cuando llego al final de las escaleras me encuentro con Mercy.

-¿Que pasó con Hero? - cuestiona y levanto mi dedo en señal de que no hable.

-¿Dónde está Tom? - pregunto en vez de responderle y apunta a la cocina y asiento - Luego hablamos - no quiero cagarla con otra persona esta noche.

La dejo allí y voy con Chris.

-¿Me puedes llevar a mi casa? - me apuro a decir.

-¿Ya? Vamos Lee la noche aún es joven - efectivamente está borracho, ruedo los ojos y extiendo mi mano.

-Préstame tus llaves - frunce el ceño.

-Claro que no, ¿cómo me iré?

-Ugh - lo dejo ahí y salgo de la casa, saco mi celular y pido un Uber.

¡GENIAL! el tipo está a 5 minutos acaso esta mierda de fiesta no podría empeorar. No, esperen claro que si puede. Ahí viene Hero con su amigo.

-Es que no la conozco tanto pero no creí que fuera así, digo me gusta - exclama Hero muy alto y su amigo le cubre la boca pero muy tarde ya que escuché todo lo que dijo, tengo dos opciones.

1.Correr a donde el a explicarle todo.
2.Correr a mi Uber que viene entrando por la calle.

Yo siendo la cobarde que soy corro al auto y me subo, alejándome de ambos. No entiendo ni porqué corrí acá porque enserio quería explicarle, no quiero que tenga una idea errónea de mi... Aún que no es tan errónea ya que lo que le dije a la chica definitivamente si se lo quería decir pero la intención nunca fue que Hero escuchara bueno al menos no la mía.

Descanso mi cabeza contra la ventana del auto hasta que llegamos a casa y bajo luego de darle las gracias al señor.

-No quiero hablar - aviso en el momento en que mi madre se levanta del sofá.

-Estaré aquí para cuando quieras - asiento y subo casi corriendo las escaleras, cuando entro a mi habitación cierro de un portazo la puerta detrás de mi.

Me deslizo con la espalda contra la pared y golpeó el piso con todas mis fuerzas mientras grito, si alguna vez existió alguna posibilidad con Hero ya no queda ni el fantasma de esa. Me odio por ser como soy, no, yo me amo pero odio esta parte impulsiva de mi.

Luego de unos minutos mis puños están casi destrozados y sangran, me levanto cuando mi madre toca la puerta como si la fuera a derribar.

-Dije que no quería hablar - exclamo sin abrir la puerta.

-Hija, abre por favor - su voz es tranquila pero puedo capturar la preocupación.

Antes de darme cuenta de lo que estoy haciendo le abro la puerta, escondo mis manos detrás de mi.

-Enséñame tus manos por favor - dice mirando las manchas en el suelo, maldición, niego - Lee por favor.

-No es nada mamá - pone su mano en mi muñeca y trae mi mano a su vista, mis nudillos reventandos causan que casi se atragante con su saliva y me mira aterrada.

-¿Por qué? - es lo único que sale de sus labios, en un susurro cabe decir.

-No es nada - repito.

-Claro que sí, mira nada más como tienes tus manos - hace contacto visual conmigo pero rápidamente miro a otro lado, avergonzada por mi comportamiento - Prometiste que...

-Se lo que prometí, pero es que no pude evitarlo mamá esta vez hice algo horrible que él jamás me perdonará - mis ojos se comienzan a llenar de lágrimas, ¡genial Lena! Llora cobarde. Mi subconsciente exclama.

-¿Quieres hablar de eso? - mi madre es la que siempre tiene que lidiar con esto, conmigo. Niego. - Está bien, ¿que opinas si te cambias y te acuestas? Y ya si mañana me quieres contar sabes que siempre te escucharé - besa mi cabeza.

Asiento y me acerco a mi armario, me comienzo a cambiar, si enfrente de mi madre, no me importa. Una vez que ya tengo mi pijama puesta voy al baño y me comienzo a desmaquillar.

Vuelvo a la habitación y mi madre me tiene lista la cama, ella merece el cielo y más, no es fácil tener una hija como yo.

-Ven - me acuesto y ella se acuesta a mi lado cubriéndome con una manta - ¿Quieres que me quede un rato? - Asiento, comienzo a llorar.

Ya no podía contener más mis lágrimas, soy una estúpida.

-No llores cariño - comienza a acariciar mi cabello, sigo llorando como tonta, creo que es más de furia y frustración conmigo misma que por lo ocurrido.

-Rompió conmigo mamá - es mi voz y mi boca pero no soy yo quien habla, no se siente como que fuera así al menos, mamá me mira confundida.

-¿Quién? - cuestiona sin dejar de acariciar mi cabello.

- Él, mamá, rompió conmigo sin siquiera tener nada y todo por mi culpa, siempre hayo la forma de arruinar las cosas cuando están yendo bien - sollozo.