Según lo indica la Escritura no hay posibilidad de que existan espíritus humanos que se manifiesten o divaguen perdidos buscando la luz porque se han quedado atrapados en el mundo y no han podido ascender.
Sino que dice: «Y de la misma manera que está reservado a los hombres el morir una sola vez, y después de esto el juicio» (Hebreos 9:27). Lo que quiere decir, que después de la muerte el espíritu humano va directamente a Dios.
Existen muchas historias de apariciones de espíritus de personas fallecidas a lo largo del tiempo, pero la Escritura desmiente este hecho.
Según el conocimiento Cristiano son los demonios que toman forma de los difuntos para engañar, ya que la Biblia dice que los ya muertos no vagan en la tierra.