White Sky. "Poth"

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   Todos los conejitos estaban en la fiesta, con un adorno de flores en su cabecita al igual que la pequeña y linda Lena.

   --...-- El de túnica blanca miro a Palette con algo de emoción de verlo tan feliz de nuevo, le encantaba su ropa, era toda de color celeste y las flores en su cabeza de igual forma. No sabía que pensar... Después de todo, ¿lo había salvado de el mismo? No podía pensar aquello tan pronto hasta que escuchará lo que tenía que decirle Palette. No podía pensar cosas de el mismo sin preguntar.

   La conejita se acercó hacia Palette con aquella pequeña sonrisa avisándole que una visita muy especial estaba justo delante suyo, la persona que lo había salvado de el. Su propio monstruo en persona. Volteo y no podía creerlo, con una sonrisa se acercó hacia el mirándolo de cerca...

   --Gothy...-- Soltó una pequeña risa y tomo ambas de sus manos entrelazandolas con las suyas. --Gracias... Gracias...-- De repente, había empezado a llorar sin ninguna explicación para el mayor. 

   --¿Denada?...-- Dijo con confusión. --¿Está todo bien Palette? ¿Cómo te sientes?...--

   --¡Todo está mejor que antes!-- Le dijo mientras sonreía con muchísima emoción. Parecía que iba a explotar.

   --¿Enserio?... Me alegra mucho... Por cierto... Tengo algo que decirte...-- Tenía miedo de lo que pensara, pero solo recibió mirada confundida de su menor. --... Me gustas Palette, te amo...--

   Recibió un pequeño sonrió arcoiris de su menor, el cual empezó a soltar pequeñas risas.

   --¡Y..yo también te amo, Gothy!...-- Respondió mientras se acercó a besar sus labios con mucho cuidado, los colores se le subieron a la cara al de túnica blanca. Los conejitos soltaban pequeñas risas... Y cuando se había dado cuenta, el sonido empezó a escucharse. --Te tienes que ir...--

   --Lo sé...-- Tomo sus mejillas y las acarició... --Eres mi único y verdadero amor... Te voy a extrañar, Pally...-- Beso sus mejillas, y por última vez, beso con cuidado sus labios.

   ...

   Despertó en su cama.

   Se tocó los labios y se sonrojo.

   Sin su padre, ni nadie.

   No tenía nada que hacer... Fue a ver la casa de colores, no estaba en ninguna parte de la ciudad.

   Suspiró.

   Esta vez, estaría completamente solo...

   Eso sí... Extrañaría a Palette, cada segundo de su vida.

   Su primer y verdadero amor...