favores; Replik

nueve.

— ¿Que pasó amor?— me dijo Manuel abrazándome.
— Un flaco, me quiso subir arriba— le dije, qmientras pude notar como se tensaba su mandíbula.
—¿Queres ir a casa?— me dice acariciandome la cabeza.
— No Manu, quedémonos pero yo me quedo acá.— dije señalando que me quedaría a su lado.
— Bueno, cualquier cosa, avísame ¿si?— me dijo con una sonrisita. Que hermosa sonrisa que tiene por dios.
—Si Manu— le digo.
La noche transcurrió así, las chicas bailando y yo me quede al lado de los chicos por que no me sentía cómoda y tampoco quería cargarles la noche.
Sonó una de las canciones favoritas de Manuel y yo, Perfect.
Manuel me agarro la mano en señal de un ¿bailamos?, obteniendo un si de mi parte. Nos dirigimos hacia la pista y ahí el tomo mi cintura y yo tomé su cuello. Más que joda parecía quince años, parece que el dj se puso romántico.
—Estas hermosa Ami— me dice mientras acaricia mi cintura. Provocando que mis mejillas se tornen a un color carmesí.
—Vos también estás hermoso Manu— le digo soltando una risita nerviosa.
—Te amo— me dice, mientras se acerca demasiado a mi cara y podía sentir que nuestras respiraciones se mezclaban.
— Yo más— dije mirándolo a los ojos. —¿Que haces Manu?— dije viendo cómo se acercaba.
— Nada que pueda arruinar nuestra amistad— dice respirando entrecortadamente.
Y sin más, ocurrió lo que toda mi vida quise que pasase, y de la manera más rara posible. Manuel me estaba besando, un beso tierno y cálido, demostrando cariño y paciencia.
Duramos así unos minutos, hasta que me separe y lo mire a los ojos.
—¿Manu, eso era parte del trato?— pregunté incrédula.
— No Ami, esto no tiene nada que ver con el trato.
Y sin más volvió a unir nuestros labios, confundiéndome y confundiéndolo a él.
No me preocupe, por que solo era un beso, como él decía, nada que pueda arruinar nuestra amistad. Pero más me sorprendió el hecho de que EL me haya besado, siendo que nunca había demostrado haber sentido algo por mi.
Y ahí estaba el error.
Él creyendo estar enamorado de Atenea.
Ella creyendo que era solo un beso de amigos.
Y esa noche, al estar ambos en sus respectivas casas, no paraban de pensar en el otro. Por un lado, un joven confundido, el cual creía que nunca podía sentir algo por su mejor amiga.
Y por el otro, una joven entusiasmada pero al mismo tiempo con sentimientos raros en ella, esperando que nada cambie.