FALL FOR YOU.

Epílogo.

Hoy hace una semana que papá y mamá vinieron de su viaje de dos semanas y media en las Islas Maldivas. Es terrible cómo puede llegar a pasar el tiempo en buena compañía.

Durante estas dos semanas han pasado muchas cosas... hemos echado nuestras solicitudes en nuestras respectivas universidades, nos hemos ido instalando cada uno en su casa y hemos disfrutado de nuestras últimas semanas de vacaciones. Septiembre empieza, y con él su rutina.

O bueno, por ahora no lo llamaría así. Tengo a mis mejores amigos conmigo, y no solo por unas semanas o un verano... todo un curso, y si todo va bien quizá más. ¿Que más puede pedir una chica de diecinueve años como yo? Sinceramente... nada.

Durante estas semanas Joseph y yo hemos estado colocando toda la ropa y las cosas de mi madre por la casa. Viviremos James, mi padre, mi madre y yo juntos.

Joe y Anne, los padres de Mike, vivirán con él a unas cinco manzanas de mi casa, así que nos veremos todos los días y a todas horas. Sophie, la tía de Mike, vivirá con Dallas y tío Scott. ¡Os dije que había un feeling especial entre ellos! Y bueno, Dallas la ha acogido con los brazos abiertos, será como la madre que siempre quiso tener. Meredith, la madre de Hanna, ella y su padre vivirán en una casa que está a tres manzanas de la mía. Básicamente vivimos todos por la misma zona. Em, su madre Hilary, su padre y Dylan vivirán en la misma casa a dos manzanas de la mía.

Y os preguntaréis... ¿qué pasa con Luke? Bueno, él se quedó en mi casa como una semana, pero Sophie, la tía de Mike, le ofreció que viviera con ella, Dallas y tío Scott, ya que le tenía mucho cariño por pasar toda su infancia con Mike.

·Diez años después... Septiembre de 2024.

Le ayudo a Megan a subir sus pequeños leotardos y le doy su camiseta para que se termine de vestir. Últimamente le gusta vestirse sola y no me deja ayudarla en nada. Hoy ha hecho sus deberes sola, es demasiado dispuesta para tener tan solo cinco años... con deciros que ya tiene novio y todo.

-Mamá, vamos a llegar tarde.-me dice Megan poniendo los brazos en jarras y frunciendo el ceño.

Cada vez que la miro la quiero más, es un sentimiento tan verdadero que hasta duele. La veo tan... yo. Con esa melena larga, que parece una pequeña Rapuncel y esos ojos verdosos, las muecas que pone y lo cariñosa que es con Mike y conmigo...

Megan es la niña más guapa, coqueta y amorosa del mundo, muchos dirán que somos las madres las que lo vemos todo demasiado perfecto, pero es así.

-Ven, acompáñame a llamar a papá y vamos a preparar tus cosas.-le extiendo los brazos para tomarla, me niega con la cabeza y me extiende la mano. Demasiado independiente. Cojo su mano y vamos hacia el baño.

-¡Bú!-dice Megan intentando sorprender a Mike.

-¡Madre mía!-dice Mike fingiendo pánico.-¡Me has asustado! ¡Eres una niña mala!-dice agachándose para ponerse a la altura de Megan. Ella ríe contagiosamente.-Y ya sabes lo que hace papá con las niñas malas, ¿verdad?-Megan ríe y viene corriendo hacia mí y se agarra a mi pierna.-¡Ven aquí bichillo!-Mike va hacia Megan, la coge y la deja en la cama con cuidado.

-¡No papi! ¡No!-dice entre risas la pequeña. Mike comienza a hacerle cosquillas y la pobre Megan no para de reír.-¡Papi! ¡Me vas a destrozar el peinado! ¡Que voy muy guapa para mi novio!-

-Bueno... porque me lo pides tú. ¡Pero ya sabes que no me gusta nada que tengas novio!-ella le mira tierna-¡Tú eres mía!-dice Mike intentando mantener seriedad.

-¿Y de quién es mamá?-pregunta Megan intrigada.

-¿Mamá?-me mira-Mamá es mía también.-se acerca hacia mí y me besa lentamente. Cuando nos damos cuenta, Megan ha entrado al baño y está mirándose en el espejo.