El Sentir De Una Sumisa

Fui Suya, Fui Su Sumisa

Primera parte

Mi nombre es Gianna Sinisterra y esta es mi historia , la cual comienza aquella tarde en que me tropezé con aquel hombre antes de la presentación de mi segundo libro , el posó su mirada sobre mi y me pidió disculpas por haberme tropezado , iba tan apurada que no preste mucha atención pero aquella mirada recorrió mi ser y un frió helado recorrió mi cuerpo , así que me dispuse a entrar al evento mientras estaba hablando de su sinopsis y de que trataba la historia al público presente; me topé con aquella mirada en la primera fila nuevamente pero esta vez me desnudaba, él me observaba detenidamente lo cual me colocaba nerviosa sin saber porque este desconocido ocasionaba este sentir.

Al terminar mi presentación mientras conversaba con mi mejor amiga Abby quien me felicitaba por la forma como me había desenvuelto, es que mi bella amiga había sido mi mentora desde que empece a escribir historias, en ese momento me dijo:

--Gianna tengo que presentarte a alguien, es un escritor de erotismo que esta bien bello y es un gran amigo.

Lo que causó en mi curiosidad y solo terminaría por satisfacerse al conocer a su amigo, recuerdo que ese día lleve un vestido tipo cóctel negro con mi espalda descubierta, me dirigí nuevamente a mi amiga preguntándole:

--¿Dónde esta el bombón que me ibas a presentar?

Cuando de repente escuche esa voz que me estremeció, era una voz pausada que movió mi sentir ¿Qué vergüenza? Me preguntaba yo misma si él había escuchado lo que minutos antes había dicho.

--Hola Abby, ella debe ser tu amiga escritora de la cual tanto hablas.

Se refería a mi, yo lo miré se notaba su porte y que era un hombre muy seguro, me extendió su mano y yo la mía al mismo tiempo que le respondí:

--Mucho gusto soy Gianna Sinisterra de Colombia, espero que lo que esta loca diga de mi sea bueno.

Creó me escuche como cuando las reinas de belleza se presentan en los concursos ja, ja, ja

Mire a Abby  preguntándome mentalmente ¿Qué tanto sabia aquel hombre de mi?

Empezamos a hablar y de repente mi amiga se levantó y nos dijo :

--Ya regreso me están llamando por celular.

Y ahí estaba sola con aquel hombre el cual me preguntó :

--¿Hace cuánto vives en aquí en Italia?

En ese momento le respondí:

--Estoy promocionando mis libros pero estaré una temporada larga y usted?

Él me miró y me dijo;

--Supongo te refieres si soy de aquí, pues te dire soy italiano, mi nombre es Fabrizio D'amico Bianchi .

Yo lo miraba embelesada, no se que tenía aquel hombre que me dejaba idiotizada, sí, no hipnotizada, me escuchaba hasta torpe para hablar delante de él, así empezamos a romper el hielo que había entre él y yo, cuando de repente me dice:

--No has pensado escribir erotismo, lo que he leído de ti me ha gustado, tienes una mezcla de dulzura en tus historias, pienso que te iría muy bien con el genero erótico.

Me dejo sorprendida, él había leído mis historias ¿Qué tanto sabía de mi?

Le respondí su pregunta:

--Es que he hecho erotismo, pero no me sentí muy cómoda haciéndolo, ya que no falta el que piensa que uno es una ofrecida por escribir el genero erótico, pero la verdad me gusta mucho aunque no es mi fuerte.