Capítulo 1.
Millas.
-Entonces los únicos que no tienen novia son ustedes dos ¿cierto? – Dijo la entrevistadora mientras se sentaba en medio de Niall y Harry.
Lauren estaba sentada en medio del televisor mientras sus manos pálidas sostenían un dije de una cruz con piedras preciosas sobre él y se preparó para la respuesta, se preparó para que su corazón se grietara una vez más. En sus ojos grises que en este momento estaban muy abiertos reflejaban las imagines que pasaban en frente de sus ojos, reflejaban a un Harry que asentía con una sonrisa de picardía y felicidad, que no tocaba sus ojos.
A ella realmente no le gustaba tener que ver esto cada día, no le gustaba ver revistas y que la imagen del amor de su vida se viera vinculada con otra chica que no era ella. Ver como todas sus amigas tenían a alguien especial con ellas todos los días, a cada hora; Podían abrazarlo, besarlo, amarlo a cualquier hora o momento que quisieran. Pero ella no, ella llegaba a una casa sola, dormía extrañando a unos brazos con tatuajes y fuertes que la sostuvieran mientras dormía, para soñar con un futuro, no con algo que sabía que era imposible.
-Entonces ¿Qué es lo que buscas en una chica Harry? – Lauren quiso dejar pasar la vos empalagosa y seductora de la entrevistadora, al igual que quiso creer que algún día podían estar realmente juntos, como en una relación real.
Ella vio como esos hoyuelos marcaban las mejillas pálidas y como los labios rojos se transformaban en una sonrisa de alegría en su rostro, observo como sus ojos verdes se encendieron como llamas y se acercó más a la orilla del sillón blanco en el que se encontraba. Inconscientemente sus ojos grises se llenaron de lágrimas, quería tocarlo, quería abrazarlo, lo extrañaba tanto, tanto.
-Siempre eh buscado – Lauren pudo palpar la felicidad en su voz y la esperanza en sus ojos – Alguien que me escuche, que sea dulce y comprensiva – Claro que siempre decía lo mismo, sabía que nunca haría una descripción sobre ella, pero no podía parara de sentir como su pecho se hundía, como sentía la decepción la golpeaba realmente fuerte. Apago el televisor y la habitación se quedó a oscuras en medio de las cuatro paredes que habían sido testigos de su amor. Otra vez.
-¿Te gusto la entrevista? – Harry presionaba fuertemente su teléfono contra su oreja con la mano derecha, mientras la izquierda tapaba su oreja para poder escuchar mejor.
El había estado más que nervioso al recordar que Lauren lo estaría viendo, había controlado sus movimientos y en más de una vez había visto directamente a la cámara imaginando su silueta en vez del cristal que reflejaba su figura pálida y escasa de vida. Pero solo por el simple hecho de que ella le vería le hacía feliz.
-Por supuesto que si – Al escuchar su voz, su cuerpo se relajó completamente y exhalo el aire que estuvo conteniendo durante todo el día.
-¿En serio?, sé que la conductora intento coquetear conmigo, ¿sabes? Soy un chico y en este caso la victima así que...
Una carcajada a través de la línea fue todo lo que basto para que las piernas y brazos de Harry perdieran fuerza, él perdió noción de todo por un tiempo.
-Realmente extraño tus bromas – Harry al escuchar eso rápidamente hizo su camino a través de la habitación ruidosa del backstage, acababan de salir de un concierto y su voz estaba más ronca de lo normal, regularmente estaba cansado hasta para respirar, pero esos momentos en que ella y el podían hablar todo dolor desaparecía, incluido el de su pecho.
-Espera un momento linda – Harry dio grandes zancadas sin aun despegar el móvil de su rostro, el frio choco contra su cuerpo, erizando la piel pero él ni siquiera lo noto. Estaba demasiado concentrado en ella.
Las piernas de Harry hicieron que el llegara rápidamente al camión en el que normalmente se transportaban por todo el mundo, no había nadie allí, y era perfecto porque a él le gustaba estar a solas con ella, aunque solo fuera a la distancia.
Harry se sentó detrás del camión, separo las piernas y cerró los ojos, para solo concentrarse en su voz.
-Te extraño tanto bebé – Susurro el contra el teléfono – Todos los días son una tortura sin ti, y no me gusta – Suspiro – No me gusta para nada fingir que no siento nada por nadie, cuando en realidad mi corazón te pertenece, si tan solo pudiera – Se ahogó con su propia respiración, con su propio nudo en la garganta. – Si tan solo pudiera gritar a las cuatro vientos que eres mía, que te pertenezco y de la misma manera lo haces conmigo.
-Harry... - Trato de decir Lauren, él sabía que ella lloraría y se sentía tan mierda por hacerla sentir así, pero él tenía que abrirle su corazón.
-Te imagino aquí conmigo, todas las noches – Continuo el – Despertándote en mis brazos, siendo lo primero que vieras, es como si, como si en realidad lo estuvieras. Aunque en realidad estas a millas de donde yo...
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Behind the scenes. [H.S]
Fiksi RemajaLauren conocía al chico detrás de las escenas...