capitulo 30

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Pasamos en medio de todas las fans, algunos gritos que no entendía, mire al horizonte, a penas la luna llena y muchas estrellas pegadas alrededor

-¿Qué horas son? – pregunte a su odio para que me alcanzara a oír

Rápidamente busco entre su pantalón su celular de ultima tecnología, miro rápidamente – las 11:30 pm.

-estoy cansada – dije con los ojos entre cerrados 

-no demoramos en ir al hotel – me acerco mas a su cuerpo

Después de una larga y extenuante pasarela por la pista de aterrizaje hasta el interior del aeropuerto, un dolor de cabeza por causa de los flashes de cada una de los paparazis, me sentía que iba a explotar

Llegamos a uno de los hoteles más caros y exclusivos del país, toda la gente nos veía como si fuéramos la joya más preciosa del planeta 

-bueno chicos aquí están sus habitaciones – dijo Scooter entregándome una tarjeta color dorado – dejare que duerman juntos – se acercó un poco – no me salgan con una sorpresa

-por favor ¿Qué puede suceder? – pregunto Justin un poco nervioso

-no quiero que cuando los valla despertar los encuentre desnudos o en una situación extraña

Mis mejillas rápidamente tomar un color rojo intenso, con solo imaginarme en esa situación mi piel se estremecía

-no prometeré nada – dijo Justin con una gran sonrisa en la cara

-cállate – le pegue levemente en el pecho 

-bueno – dijo sobándose entre risas– vamos, mañana será un día muy duro

Caminamos por los pasillos del hotel, como raro toco subir hasta el extremo del edificio por las escaleras, no pude convencerlo de subir por el ascensor, casi 15 pisos 

-no puedo creer que me hicieras hacer esto – saque la llave de mi bolsillo trasero 

Abrí lentamente la puerta, mis pies estaban adoloridos

-entiéndeme, no quiero volver a quedar encerrado en esas cosas metálicas – metió sus maletas aun lado de la puerta - ¿aun te duele la cabeza?

-no solo eso – me senté en la cama, quitándome el tenis y me recosté de un solo tirón en la gran cama matrimonial

Al cerrar los ojos, escuchaba claramente lo que sucedía a mí alrededor, pero mi cabeza no me dejaba procesar lo que sucedía

-toma – dijo la voz aun lado mio. Abrí los ojos. Estaba parado aun lado con una botella de agua y una píldora – te servirá para el dolor de cabeza y por el pie

Me senté con esfuerzo – gracias – la introduje con lentitud en mi boca y con ayuda del agua la trague

-metete en las cobijas – dijo ayudándome a parar lentamente 

Le hice caso casi sonámbula, mi cuerpo se derrumbo en el colchado, olvidando todo y quedándome profundamente dormida

¿perdonarte?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora