"Secreto" °•Vegebul•° [Próximamente En Edición]

✴Cinco✴

🔞🔥

Vegeta Ouji

Estoy por hacer lo que tanto he querido desde hace un par de meses.

Estoy a punto de tener sexo con Bulma.

En este momento solo existimos ella y yo, no quiero pensar en nada ni nadie más.

Después de unos minutos de caricias y besos ya nos encontramos semi-desnudos, solo quedan nuestras prendas interiores.

Y dejamos nuestro apasionado beso para mirarnos fijamente a los ojos.

—No sé... si esto está bien, pero sigue, no te contengas—

Al oírla decir esas palabras cerca de mi oído y agitada, me motivó aún más, haré lo que ella me pida.

—Con gusto, señorita Briefs—

Hice que se recostara en la cama; yo me posicioné encima suyo y comencé a besarle el cuello, luego bajé con castos besos hasta su brasier, lo saqué sin dificultad, sus pechos definitivamente se volverán mi adicción, bien formados, redondos y firmes.
Es una diosa, su cadera tiene una forma muy sexy con su pequeña cintura, es una perfecta combinación.
Seguí bajando mis besos hasta llegar al borde de sus bragas, me deshice de ellas, lo que tengo en frente es una verdadera belleza, tenerla desnuda debajo de mí es el paraíso, y eso... que aún no estoy dentro de ella.

Al no aguantar más quité mi bóxer y lo lancé, ella empezó a jugar con su lengua en el lóbulo de mi oreja y comenzó a besarme el cuello, mientras que con su mano acaricia mi erecto miembro. Eso provocó que saliera un leve gruñido de mi garganta.
Antes de continuar, ella estiró su brazo hasta su mesita de noche y sacó un preservativo me lo entregó, precavida, pero no lo usaré, de seguro lo tenía para Kakarotto, negué y ella sonrió traviesa pero obvio no me quedaré así, saqué uno de mi pantalón, me lo coloqué y volví a posicionarme encima de ella.
Besé uno de sus pechos, lentamente separé sus piernas y me acomodé entre medio, nos regalamos una sonrisa perversa y me adentré en ella.

Comencé dando embestidas lentas pero profundas, ella gemía demasiado excitada.

¡Dios! Esto es lo mejor.

—Ah Vegeta ¡M.más!— comenzó a pedirme.

—Como quieras, muñeca—

Comencé a embestirla fuerte y salvajemente, nuestras reparaciones estaban agitadas y nuestros alientos chocaban constantemente, ella cada vez gemía más alto y mi excitación aumentaba.
Sus pecho sube y baja acorde a nuestros movimientos, con una de sus manos agarró firmemente las sábanas y con la otra comenzó a tocarse uno de sus pechos.
Esta imagen la tendré grabada por siempre en mi mente, ver como se toca y como gime por mi causa, me está matando, joder.

—No... pares. Ahh V.Vegeta, eres excelente... ¡Ahh, sigue! Por favor... no pares— me miró fijamente a los ojos al decir aquellas palabras.

Sonreí y la besé, acatando sus órdenes.

Mordisqueé uno de sus senos y ella se estremeció, me dispuse a besarle el cuello y su respiración cada vez se agitaba aún más, sus gritos y jadeos no cesaban y su intimidad apretaba mi miembro, ya no puedo más, mí respiración también se agita y de vez en cuando, suelto jadeos y nos besamos para no descontrolarnos al gemir.