En Partes

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El demonio apareció en el puerto de trenes, existía un olor a muerte cerca de los carriles, no podía reconocer quién era la persona que en realidad iba morir, ya que en ese momento todos los humanos que habían ahí olían a muerte, la vida que tenían todos ellos eran tan absurdas que muchos de ellos que transitaban, tenían un olor semejante a la muerte, un olor tan rancio como si se les pudriera la carne ... Cómo si fueran mal olientes leprosos de almas. Era otro lunes de empezar la semana y la neblina cubría esa rebaño de humanos aglomerados en filas, sin deseos de vivir, sin sentidos de existencia...y el demonio olfatea a cada uno de ellos.
Entonces reconoció el cuerpo que apenas brillaba... Era un hombre de mediana estatura, tenía un collar en mano y la tristeza deformaba su rostro. El demonio se acercó y le dijo:
+ Porqué deseas la muerte?
-El hombre con miedo dio un salto hacia atrás de la línea amarilla, parecía que su intención era saltar a los rieles del tren, sus ojos le delataban la pena que llevaba. Y con miedo dijo- señor diablo te doy mi alma q cambió de que hagas feliz a mi familia, cuidalos y protégelos siempre. Lloroso  aferrado a su collar cerro los ojos.
+ No soy el diablo, quizas un demonio, así me llaman uds. Te has resignado a morir porqué? La vida ya no te alegra?, Acaso no es esto lo que desean los humanos cada vez que reencarnan? Acaso la publicidad humana no les vende la alegría? Acaso el dinero humano no es suficiente? Las metas y sueños? Que pasó contigo?
- No soy de acá, vine de otro país, dejé mi familia para luchar por ellos, pero no he conseguido trabajo, perdí tiempo acá, y perdí lo que más ame, mi mujer espera dinero y mis dos hijas esperan con ansiedad que yo pueda salvarles de la carencia. Pero acá también carezco de todo, a las justas puedo existir. No puedo más...-sus ojos llenos del dolor del fracaso le obligaron a llorar una vez más. su alma era un mar de tristezas.
+ Y piensas saltar así nomás? No eres malo, solo que no te exiges más de lo que debes, no confías en ti y si no crees en ti, ni tu Dios falso puede ayudarte ni escucharte, ni siquiera la suerte atenderá tus reclamos, crees hacer todo, pero veo tu vida y solo veo que fracasas porque no intentas hacer algo distinto, fracasas por qué siempre haces lo mismo, eres un ratón en una jaula, que no sabe cómo entro y menos salir de la trampa. Da vueltas en su jaula hasta hallar la muerte.
- crees que no tengo miedo? Esto es por todos, no puedo más, soy un cobrarde. Soy un fracaso, ser bueno no sirve de nada....- su llanto no le dejaba pronunciar bien las palabras.
+Ya cállate humano- hasta me irritas, si tanto deseas la muerte mereces estar conmigo, aquí nunca más saldrás. Toda tu familia confío en ti, sin saber que tú no confiabas en ti siquiera. Cómo algo irónico y de amargura el demonio le dijo algo que no podía hacer, le dijo- "castigaré a tu familia por tu culpa, iré por ellos en ves de tu alma, eres alguien que no vale ni para el desayuno.
- El hombre al escuchar esa amenaza, siente el temor de que su familia muera por esa maldición dicha, e intenta detener al demonio, su alma cambia de color y brilla, crece una esperanza de cambiar su vida, parecía que el demonio logro su cometido con esa amenaza, el hombre comenzó a florecer de nuevo como si hubiese muerto y reencarnado, su fuerza de voluntad volvió a él. Intenta detener al demonio que estaba enfrente suyo con sus dos brazos, pero tropieza con sus pies y atraviesa el cuerpo voluble del demonio y para su mala suerte cae a los rieles. El tren de la mañana llegaba a toda marcha, con una velocidad que no pudo detenerse, el cuerpo cayó y el tren pasó por encima, el cuerpo mutilado brinco en partes, pedazos de él rodeaba el camino del tren, la sangre en las llantas formaban una nueva pieza de arte para el demonio. Sus miembros separados le recordaba la historia de aquel hombre descuartizado por 4 caballos. Esa pintura "San Hipólito" de Bouts.

+Una pena, tan miserables pueden ser? Tienen que llegar al tope, al límite de sus existencias, para tener alguna esperanza de vida? No entiendo la especie humana.. me intriga sus vidas.- el demonio se acercó a la cabeza arrancada de las llantas, aún esos ojos contenían la luz de su alma, se acercó y la absorvió lentamente, su nueva alma llena de luz le reconfortaba, pero se lamentaba que sucedieran así las cosas.- humano torpe....humanidad tan similares a las ratas de laboratorio... Que pasaría.... Si... - pensaba.- El demonio calló sus pensamientos y se dijo- no, no. -burlandose se retiró y voló por la neblina, lleno y feliz. Aunque con un  pensamiento inquieto se desvaneció.

Relatos de un DemonioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora