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Narra Brisa

Sentí aquellos brazos fuertes donde me sentía segura rodear mi cuerpo, voltee y le correspondía el abrazo escondí mi cara en su cuello dejando un beso.

Brisa: gracias por este día.
Brian: gracias a ti por compartirlo conmigo.
Brisa: eres el mejor (le sonrió).
Brian: se que no soy perfecto pero por ti puedo hacerlo.
Brisa: para mí ya lo eres (beso su barbilla) eres muy alto (me quejo).
Brian: eso lo arreglamos.

Me cargó haciendo que mis piernas se enrollaran en su cadera haciéndome sentir su leve erección, beso mi cuello dejando leves mordiscos que provocaba pequeños jadeos en mi, de un solo tirón saco mi traje de baño, con pasos torpes  llegamos a la ducha al observar que su bañador ya no estaba sonreí de lado al ver esa sonrisa pícara.

Entramos a la ducha sin romper aquel beso, sentí el agua fría caer de golpe en nuestros cuerpos haciendo que estás de erizarán, me recargo en la pared rompiendo el beso para bajar besando mi cuello, sentí su miembro rozar en mi entrada haciéndome gemir.

Brisa: por favor.
Brian: ¿Quieres que pare?
Brisa: quiero que me folles.
Brian: ¿Suave o rudo?.
Brisa: quiero que me dejes en cama por una semana.
Brian: eso me gusta.

Lo sentí entrar en mi haciendo que pegará un grito, me apoye de sus brazos al sentir como entraba y salía de mi tan rudo, su boca paso a chupar mis senos mientras que con una mano me sostenía con la otra amasaba mi seno libre, por un momento sentí que quedaría invalida por siempre pero el placer inundaba más mi mente.

Mis uñas se clavaron en los brazos de Brian al sentir como sus penetraciones eran cada vez más profundas, los gemidos eran cada vez más fuertes al igual que los gruñidos que daba Brian cada vez que entraba en mi, mi vista su nublo y mi espalda se arqueo gemi el nombre de Brian al sentir como explotaba en un gran orgasmo y a los segundos sentí el líquido caliente al saber que Brian había llegado también.

Descanse mi cabeza en el hombro de Brian, cuando nos recuperamos me bajo lentamente sin embargo me sostuvo por qué mis piernas temblaban, nos dimos una ducha llena de coqueteos y uno que otro beso.

Nos terminamos de arreglar (imagen en galeria) me ayude a cepillar mi cabello, salimos de la habitación riendo por una pequeña broma que le hice, llegamos a la cocina, Brian de sento en el banco que estaba frente a la isla, me puse frente a él con un brazo en mi cintura suspiro y lo mire.

Brisa: ¿Que quiere cenar el señor?.
Brian: lasaña.
Brisa: eso me sale horrible.
Brian: tú esposo exige comer eso.
Brisa: tomaré venganza a eso.
Brian: apúrate que muero de hambre
Brisa: idiota (le saco la lengua).
Brian: que madura
Brisa: demasiado.

𝑳𝒂 𝑺𝒐𝒎𝒃𝒓𝒂 #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora