Iғ ᴛɪᴍᴇ sᴛᴀɴᴅs sᴛɪʟʟ ➳ [ᴢᴀʏɴ ᴀᴜ] || ᴇsᴘᴀñᴏʟ

4. ¿Qᴜɪᴇɴ ᴇs ᴀᴛʀᴀᴄᴛɪᴠᴏ?

Después de una semana de estresarme por esta reunión donde estaba convencida que me sermonearían por estar tan floja, las cosas en realidad no resultaron tan malas después de todo. De hecho, todos estaban satisfechos con mi ética de trabajo e incluso me alentaron a quedarme para la junta en la sala de juegos, ya que nunca me han visto ahí. Estaba en shock, por decir lo menos, pero contenta. Quizá soy demasiado dura conmigo misma.

Después de contestar a todos mis correos electrónicos, tomo un café antes de ir a la sala de juegos. Todos tienen un trago en sus manos, pero como es usual, estoy temblando y necesito energía extra para ir al gimnasio, al cual me dirigiré pronto.

Luke me ve e inmediatamente se acerca a mí con una gran sonrisa en el rostro.

—¡Hola, finalmente viniste!

—Lo sé. Estuve muy estresada por la reunión de esta mañana, pero decidí relajarme.

—¿Con café? —Alza una ceja.

—Con un poco de música y pinball. —Le digo, apoyándome contra la máquina—. Solo vine para que James se quede tranquilo. Aparentemente necesito divertirme más aquí.

—El jefe siempre tiene la razón. —Luke sonríe—. ¿Quieres jugar un juego de pool?

—Estaba a punto de irme al gimnasio, en realidad. Estás cordialmente invitado, ¡es día de piernas!

—Paso. Vamos, ¡un juego! —Se queja.

Ruedo mis ojos y cedo a sus súplicas.

—Un juego.

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Por supuesto que no fue solo un juego. Un juego se convirtió en dos, luego estábamos empatados y tuvimos que jugar el mejor de tres. Yo gané y me adjudiqué el título de Rey del Pool que Luke se había autoproclamado.

Una vez que entro al gimnasio, veo a Lauren con su novio, Sam, lanzando puñetazos al saco de boxeo. No creo que yo pueda capaz de salir con alguien que trabaja en la misma compañía que yo, especialmente en el mismo departamento. Ellos van al trabajo juntos, se ven todo el día, almuerzan juntos, van juntos a la sala de juegos o al gimnasio y vuelven a casa juntos. En todo caso se ven felices, así que, si su relación funciona, genial. Solo me da curiosidad saber sobre qué queda por conversar cuando llegan a casa. Es loco, yo nunca podría hacer eso.

Ambos me saludan cuando paso por su lado y yo sonrío. Cuando ya me he estirado lo suficiente, voy hacia las pesas y me pongo los audífonos; recuerdos de María vienen a mi cabeza. Ella era mi colega favorita. Íbamos juntas a la sala de juegos y luego de tomarnos un trago, terminábamos en el gimnasio. A veces incluso cantábamos en el auto y salíamos luego. Eso era algo súper grande para mí, estar tan dispuesta a salir con alguien después del trabajo, pero ella era genial.

Luego se embarazó y decidió quedarse en casa hasta que su hijo fuera lo suficientemente grande para llevarlo al jardín. Es egoísta de mi parte, pero extraño a mi compañera de gimnasio y amiga. Pienso en ella cada vez que estoy aquí. He tratado de mantenerme en contacto, pero las cosas cambian.

Después de una sesión de una hora, voy a casa lentamente gracias a la hora pico de viernes. Debo agradecer que la nieve ya no sea más un problema, pero sigue haciendo frío afuera. Todo lo que quiero hacer es darme un baño de burbujas. Eso sería perfecto después de un estresante día en el trabajo y una intensa rutina de ejercicios.

Empiezo a manejar más lento cuando me acerco a la casa de Zayn. Sigo teniendo muchas preguntas. ¿Vive solo? ¿Qué le hizo decidir vivir aquí? ¿Qué hay con Él? Supongo que todo eso permanecerá sin respuesta. No estoy segura porqué me causa tanta intriga de todos modos.