El error del omega había sido bajar la guardia, los tiernos recuerdos con su Alfa habían provocado un poco de tranquilidad en el joven lobo haciéndolo dormir profundamente como hace varias noches que no hacía, por lo que no sintió los pasos sigilosos acercarse a su campamento, el joven omega ni siquiera se inmuto ante el sonido del cierre lo cual le dio la oportunidad a los intrusos de continuar con su trabajo.
Lo siguiente que supo Luhan es que era cargado por unos fuertes brazos, en su cerebro seguían presentes las telarañas del sueño, podía sentir diferentes aromas a su alrededor, no era un solo lobo, eran varios, su aroma era tan fuerte que lo hizo arrugar el rostro. No conocía a aquellas personas, lo cual comprobó una vez que sus ojos se abrieron, miles de alamas sonaron en su cabeza logrando que despertara por completo. Pequeños balbuceos escaparon de su boca llamando la atención del lobo que lo sujetaba, el sujeto lo miro, era corpulento, sus rasgos eran duros y marcados provocándole escalofríos pero no de los buenos, cuando aquellos ojos negros se encontraron con los suyos el miedo fue aún peor, no tenía ni idea de a donde lo llevaba o quién demonios era ese sujeto ¿Un rebelde? ¿Qué haría con él? ¿Cómo los habían encontrado? ¿Dónde estaba Yixing? Oh, Dios Mío, YIXING.
- Suélteme...-su voz salió apenas en un susurro, estaba tan asustado, pero su preocupación por su joven amigo era mayor que su miedo así que se obligó a respirar y actuar como un hombre- ¿Dónde está mi amigo? ¿A dónde me llevas?- el hombre ni se inmuto ante tus gritos, sólo siguió caminando como si fuera una bolsa de patatas lo que estaba cargando y no a un omega gritón- ¡Te estoy hablando! – una vez más fue ignorado- ¡Suéltame! Estarás en grandes problemas cuando me libere- y con esas palabras Luhan comenzó a retorcerse en los brazos del desconocido, patadas y puñetazos fueron lanzados obligado al hombre más grande a detenerse, aunque los golpes no le afectaban en lo más mínimo temía que el chico se lastimara y eso le trajera problemas con su Alfa.
- Deténgase, va a lastimarse – Luhan hizo oídos sordos a su petición y siguió luchando por su libertad- Joven Luhan, por favor- eso sí que lo hizo detenerse ¿Cómo ese completo descosido sabía su nombre?
- ¿Cómo...cómo sabes mi nombre?
- Porqué yo se lo dije – esa voz. Cada uno de los vellos de su cuerpo se erizaron, él sabía perfectamente a quien pertenecía, nunca podría confundir aquellas tonalidades graves.
- Sehun...
- Luhan- Sehun se acercó hasta su omega con pasos firmes, le hubiera encantado huir pero para su desgracia seguía en los brazos de aquel desconocido que era diez veces su tamaño. Su Alfa se veía enojado...bueno, quizás la palabra enojado no alcanzaba las dimensiones de cómo se encontraba Sehun en esos momentos, tal vez furioso sería una palabra más aceptable, sin embargo, no era sólo ira lo que reflejaban sus ojos, podía distinguir perfectamente la preocupación y un gran alivio, eso lo hizo sentir un poco mejor, pero sólo un poco- Tu y yo tenemos muchas cosas de que hablar.
Sehun no sabía cómo sentirse, estaba molesto por el escape de Luhan, por aquellas semanas de preocupación pero también estaba infinitamente aliviado por haberlo encontrado y ver que estaba en perfectas condiciones, obviamente tampoco le gusto ese persistente peste a beta que estaba impregnado a su omega, según los lobos que lo habían encontrado Luhan no estaba solo, había un cachorro de beta con él, le tranquilizo que fuera un niño pero seguía sin agradarle.
El camino a casa fue bastante incomodo, Luhan no le dirigió palabra alguna y apenas dejo que lo tocara, su lobo estaba ansioso por tocarlo y tenerlo entre sus brazos pero ante el rechazo del omega se vio obligado a quedarse abajo. El viaje fue largo, no hubo besos, ni miradas juguetonas, mucho menos toqueteos de reconciliación, era horrible, espantoso y quería romper algo.
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Incompleto -HunHan-
WerewolfSehun es el Alfa de la manada del este, él lo tiene todo, una manada feliz, salud, dinero, buena apariencia pero le falta lo más importante: Amor. Desde que era un pequeño soñaba con encontrar a su compañero destinado, nunca espero encontrárselo a l...