08: ¡Todo MENOS eso! (2/2)

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El dolor de cabeza que traía anoche desapareció. Sentí una felicidad y tranquilidad inmensa cuando por fin mis ojos pudieron ver todo como antes

El suelo estaba cubierto por ropa. Esta no es mí habitación; mire extrañado todo el lugar, tome mi camisa que estaba encima de un sillón cerca de la cama; Intenté levantarme para darme una ducha pero unos brazos se enredaron en mi cintura y unos suspiros golpearon mi nuca poniendo mi piel de gallina. Gemí levemente, viré mi rostro para ver quien se encontraba a mi lado. No lo puedo creer, abrí mis ojos como plato y mi pulso aumento de una forma inexplicable

Siendo sincero, solo recuerdo el momento del bar y la caminata hasta su casa, pero lo que sucedió después me es muy confuso

Este amanecer no me sienta bien, mucho menos con él a mi lado. ¡¿Qué hice para merecer esto?!

















Unas hora antes...



















─Carlos... No encuentro mis calcetines negros ─buscaba mis calcetas color oscuro mientras sacaba la ropa de mi cajón─ ¿Las has vistos?

─Joven Temo, recuerde que este no es la habitación en la que creció y vivió por casi 17 años ─abrió mi segundo cajón y saco el par tomándolo en sus manos─

─Lo siento, estoy acostumbrado a mi vieja habitación ─tome las calcetas y me senté en la orilla de mi cama, suspire agotado; me coloque unos tenis de color rojo y con franjas blancas, mire a Carlos y sonreí tratando de ocultar mi bajo rendimiento emocional─ Gracias

─Ya debería ir a la sala

─Supongo que me toca poner las cosas en la mesa, ¿Cierto?

─¿Y usted que cree?

Casados por accidente - AristemoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora