Destiny

Peor Que Pretty Woman

Narra Alexander

Atrapo a Yoongi antes de que vuelva a entrar en los vestuarios.

-Shhh mi amor no grites o vendrán hacia aquí los de seguridad, porque no mejor me llevas de compras, a comer y luego hacemos el amor hasta que ya no podamos más- le digo esperando que eso lo distraiga un poco.

No solo consigo mi objetivo sino que sus pupilas se dilatan en menos de un segundo y su mirada cambia a una de depredador apunto de atacar.

-Tranquilo tigre que estamos en un lugar público- le digo.

Para mi suerte fue peor el remedio que la enfermedad porque observo como llega hasta mí y me sube a su hombro en modo cavernicola sacando un grito de mi parte y dándome a su vez tremendo cachete en el culo.

Camina casi corriendo conmigo encima hasta llegar a la entrada y ahí parece que recobrar la lucidez.

-Cuando lleguemos al hotel vas a llorar de placer- me dice mordiendo mi labio inferior y abriendo la puerta para que yo pase hacia el coche, el cual nos espera unos metros más adelante.

Una vez puestos en camino coloca su chaqueta sobre nuestras manos para que el chófer y el guardaespaldas no vean nada.

Descaradamente se veía que haciamos pero no es lo mismo ver que intuir y mi chico era precavido al cuadrado.

Bajamos del coche en una zona de lujo llena de tiendas y mi estómago se retuerce de la incomodidad.

-Yoongi pensé....- las palabras no me salen porque como le dices a tu novio famoso y rico que tú en esas tiendas no puedes permitirte comprarle nada como tenías planeado?.

-Qué ocurre?- me mira extrañado pensando en que me pasa observa a su alrededor y me hace caminar a una de las cafeterías cercanas, bajamos a la zona vip para no ser molestados.
En la mesa hay un par de botones que no sé para que cojones son.

Además el sitio es muy bonito con sillones chill out blancos y marrones junto a una mesa.
La luz es tenue y el ambiente muy relajante.

Un camarero entra a los pocos minutos dejando una tarjeta en la mesa.

-Quieres un té?- me dice Yoongi mirandome aún preocupado.

-Si porfavor que sea rojo y con un poco de anís- le digo al camarero.

Mi amorcito pide un whisky solo y algunos platos para comer.
Minutos después un sonido como de un timbre sale de la puerta y mi salvador pulsa uno de los botones haciendo que la puerta se abra.

-Joder que modernidades- le digo sacando una carcajada de él.

-Y sabes lo mejor?- me dice una vez damos la gracias al camarero después de dejar nuestro pedido en la mesa.
-Que esa puerta solo se puede abrir con este botón o con esta tarjeta- me dice moviendo sus cejas de manera diabólica.

-Vale eso no se si me ha dado miedo o me a excitado- le digo riendo.

-Venga dime que te pasa, te conozco lo suficiente para saber que algo te molesta- me dice mirandome con atención.

-Uff... No es nada, es solo que pensé que iríamos a un sitio menos... -.

-Lujoso?- me dice terminando mi frase.

-La verdad es que sí. No me gustan los sitios tan... ostentosos- le digo bajando mi mirada.

Oigo como se levanta y se coloca a mi lado.
Noto su mano caliente en mi barbilla haciendo que mis ojos se posen en los suyos.

Una sonrisa de encías me recibe iluminando su rostro.

-Guapo, sencillo y sincero para mi te quiero- me dice haciendo que una carcajada salga de mí.