LEER LO ULTIMO!! MUY IMPORTANTE!
PARTE ESPECIAL: 2 En 1
Nico se casa (Imaginense que es antes del capitulo 26 XD)
Nico se colocó el esmoquin perfectamente confeccionado para él. La tela era suave, negra y de calidad. Era su día, era el momento de demostrarles a los demás que no era un impulsivo y que su matrimonio con Brenda (Una chica que habia conocido en un viaje) podía funcionar tan bien como lo estaba haciendo el de sus amigos. Todavía estaba sentido con ellos, había pasado un mes y no se habían hablado. Sabía gracias a los chicos que Lodovica al fin había aprendido a cocinar y a tender una cama, y que Diego preparaba todos los papeles para su admisión a la universidad, pero no les había dirigido si quiera una mirada hasta que se disculparan por desconfiar de él. Subió al Mercedez negro que lo esperaba fuera del apartamento en el que se encontraba. Se mudaría a Canterbury una vez casado, sus padres vivían en Londres y también se habían opuesto a esa boda. Incluso más que “Los Blanco”. Todo el trayecto se hizo insoportable. No era una fiesta tan grande como la de Diego, ni siquiera le habían hecho despedida de solteros. Ni siquiera tenía más invitados que sus amigos, los cuales harían de testigos. En realidad, era una boda triste, una boda que nadie quería. Y eso le dolía a Nico, porque más que para demostrarle a los demás que podía ser responsable y dejar de ser el bufón del grupo, quería que ellos tuvieran en claro que se había enamorado de Brenda. Estaba molesto porque había pensado que Diego lo entendería. Él le había contado que cuando tenía ocho años, la primera vez que vio a Lodovica con su cabello castaño y un vestido lila, se enamoró de ella y supo que su destino era estar con ella. No entendía por qué Diego no quería aceptar que a él le había ocurrido lo mismo con Brenda. Se bajó del auto con las manos sudorosas, con la voz en un hilo y con la cabeza en otro sitio. Los nervios lo comían vivo, pero era valiente y el cariño que sentía por la chica castaña lo impulsaba a entrar al registro civil. Habían acordado no casarse por la Iglesia, necesitaban invitados y eso era lo que menos tenían. Entró al edificio y se encontró con Ruggero, Tini, Facu, Mechi y Alba esperándolo. Brenda aún no llegaba y Nico sonrió que al menos mantenía la tradición. La chica llegó luego de diez minutos, iba con un vestido blanco floreado hasta las rodillas, perfecto para un día de verano. Nico le tendió la mano y ella la sostuvo, estaban listos, se casarían aunque el mundo entero se viniera abajo. Procedieron a leer los documentos y presentar a los novios y a los testigos. Era una ceremonia bastante más vulgar y corriente que en una Iglesia o en algún sitio arreglado para una boda, pero a pesar de que Nico tenía la condición social para haber optado a más, no lo hizo porque Brenda se lo pidió. El juez los casó después del papeleo, los hizo firmar y legalmente Brenda había pasado a ser una Garnier. Los chicos se acercaron a felicitarlos con abrazos, algo incómodos por la ausencia de sus otros dos amigos y por la precipitada decisión de su amigo. Facu pensaba que sólo era un capricho más de Nico, a veces hacía cosas estúpidas sin pensar en las consecuencias, así que no se asustó demasiado con su compromiso. Ruggero estaba horrorizado, temblando del miedo de que Nico se divorciara al día siguiente y se decepcionara y frustrara. Sin embargo, Nico parecía estar en una nube de cristal, volaba con una sonrisa sujeto de la delicada mano de Brenda, pero parecía que en cualquier momento el encanto se podía quebrar. Cuando salieron del registro civil en silencio, se detuvieron de golpe. Frente a la acera, una pareja los esperaba e iban vestidos para la ocasión. —Creí que no aceptaban todo esto —les gruñó Nico, con cierto dolor en la voz. —Es verdad, pero eres mi mejor amigo y amante, ¿en serio creíste que faltaría a tu gran día? —Nico sonrió de inmediato al escuchar las palabras de Diego, y Brenda lo dejó correr a abrazar a Diego. Cuando se separaron, Nico le dio un efusivo abrazo a Lodovica también, ella se disculpó por lo que le había dicho cuando le anunció que se casaría y le dijo que ella lo apoyaría en todo, por más alocado y absurdo que fuera. Después, Lodovica fue a felicitar a Brenda y le advirtió que a la que hiciera sufrir a su amigo, la tiraría por la escalera. Cada pareja se fue en un auto a un restaurant donde habían hecho una reservación para la celebración. Mientras comían, Diego no pudo evitar preguntar: —Nico, en serio ¿Por qué esta boda tan precipitada? —Tú te casaste en tres meses, y yo en uno, no veo la diferencia, ambas bodas fueron precipitadas. —Ya, pero yo tuve que esperar diez años para declararme —Nico guardó silencio, era un buen argumento que no podía discutir. —La verdadera razón… —los interrumpió Brenda —… es que Nico será padre. Diego escupió su jugo, Ruggero se atoró con la comida, Lodovica abrió la boca, Facu gritó un gran ¡¿Qué?!, Tini los miró sorprendida, Mechi no podía creerlo, Alba exclamó con felicidad: —¡Lo sabía! Todos pasaron de Brenda, a su estómago y luego al rostro de Nico, quien había empalidecido. —Espera… ¡¿QUÉ, YO PADRE?! Parecía que en cualquier momento se iba a desmayar, hasta que Lodovica estalló en carcajadas y luego Brenda. —Te acabas de casar Nico, ¿en serio un hijo te parece “imposible”? —¡No estoy listo! ¡Pido el divorcio! —comenzó a chillar. Pero Brenda seguía riendo y todos fijaron su atención en ella. —No puedo creer que cayeran… —decía entre una carcajada y otra—. Nico no serás padre, deja de hacer escándalo, y ustedes… —les dijo al resto, apuntándolos con el dedo—… No sean tan ingenuos, ¿sí? —Bueno… —le dijo Diego a Lodovica mientras los demás comprendían la broma y Nico salía del susto bajo la risa de Laura, que no podía soportar las carcajadas—. Al menos sabemos que son tal para cual, un par de niños sin niñera. Y Lodovica no pudo estar más de acuerdo.
