Wanda

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Título: Por un descuido.

💕Dedicado a @Soe1eevee4life💕

Wanda se preguntaba qué estaba mal con ella, si estaba haciendo algo que te molestara, o si alguna vez fue grosera pero nada llegó a su mente. No había una explicación racional para que ___(tn) la evitara a toda costa.

Si Wanda estraba a una habitación, tú salías. Si tenían una misión juntas, tú hacías todo el trabajo lo más rápido posible para terminar y volver a casa, nunca entrenaban juntas y las únicas palabras que Wanda recuerda que le hayas dicho son 'hola' y 'adiós'.

"Piedra, papel o tijeras para ver quién lava los trastes." propuso Tony. Para tu mala suerte perdiste. Estúpidas tijeras que cortan papel.

El resto del equipo corrió a la sala para ver una película mientras a ti te tocaba lavar todo lo que ensuciaron, no era justo.

Mientras limpiabas todo tarareabas una bonita canción romántica, de esas cursis, que generalmente eran el gusto culposo de las personas. Estabas tan sumergida en la melodía en tu cabeza que no reparaste en la presencia de Wanda observandote desde el marco de la puerta.

"Me encanta esa canción." te dijo.

Volteaste asustada hacia la chica, tanto que accidentalmente te salpicaste con agua. "Genial, ahora creerá que soy torpe." pensaste.

"Creo que fue divertido, no torpe." sonrió Wanda. "Uh, lo siento no quería entrar en tu cabeza, a veces solo sucede."

Entraste completamente en pánico, esta era la razón por la que nunca entablabas una conversación con la vengadora. ¿Qué sucedería si ella hubiera echado un vistazo a tu mente minutos atrás cuando cantabas? Tus pensamientos estaban en la sonrisa y el bonito acento de Wanda, ella pudo haber descubierto que tenías un gran enamoramiento con ella.

¿Y si lo hizo? ¿Y si leyó tu mente? No lo sabías pero ahora no podias dejar de pensar en eso. Tal vez Wanda lo descubrió y está intentado hacer las cosas menos vergonzosas para ti.

No pudiste responderle nada porque sentías las lágrimas al borde de salir, el panico en tu mirada y la pena en tu corazón. Dejaste la mitad de la vasija en el lavaplatos y saliste corriendo.

"Yo no quise..." intentó disculparse Wanda, aunque no sabía por qué, pero tu ya estabas corriendo a tu habitación.

Lloraste un poco mientras tomabas una ducha, después cepillaste tu cabello y te preparaste para dormir; fué inútil, no podías dejar de ser una paranoica.

"¿Y si ella ya lo sabe?" pensaste. "Tal vez sea lo mejor, así dejo de huir como una idiota cada vez que está cerca." te animaste.

Tomaste tu diario y saliste rumbo a la sala, si no podías dormir por lo menos podrías ponerte al corriente con algunos episodios de Greys Anatomy; además aprovecharías para drenar todos tus sentimientos a las hojas de tu diario.

****

La mañana siguiente Wanda tenía entrenamiento con Steve, era un fastidio, el súper soldado empezaba las lecciones a las 5:00 am por lo que ella debía levantarse muy temprano, la mayoría del equipo aún dormía por lo que se sorprendió al verte en el sofá de la sala.

"___(tn)" te llamó pero no obtuvo respuesta. "Entiendo si estás enojada, siento lo de anoche, yo no quería invadir tus pensamientos." se disculpó pero nuevamente el silencio le respondió. "¿___(tn)?"

Tú estabas tan profundamente dormida que hasta un bebé estaría celoso. Anoche el sueño te venció alrededor del quinto episodio de tu serie. Wanda te observó con una ligera sonrisa en su rostro y se dispuso a levantar un par de cosas que habías tirado por accidente: un paquete de galletas medio vacío, tu celular y una libreta.

Sin querer Wanda identificó su nombre entre las palabras

y leyó el resto del párrafo:

"Si ella supiera lo temerosa que estoy de confesarle lo que siento, tal vez tendería un poco de piedad. Por ahora me limito a amarla en secreto."

Tú hablabas de ella y Wanda no tardó en unir los puntos. Tenías miedo de ser rechazada o algo peor, ser humillada por la persona que amabas; pero Wanda nunca te haría algo como eso.

La sokoviana escribió una nota en tu diario, dobló la hoja y dejó el cuadernillo sobre tu pecho, después salió rumbo al gimnasio, si llegaba tarde Steve la haría correr un kilómetro más.

Cuando despertaste lo primero que sentiste fue el material duro de tu diario, limpiaste tus ojos intentando despertar más rápido y abriste el cuaderno en la página marcada.

"También me gustas.

-Wanda ❤"

Sonreiste como tonta y releiste la nota una y otra vez hasta que todo pareció más real. Esa era la letra de la vengadora ¡Y su firma! Sin perder tiempo corriste hasta tu habitación para asearte un poco. Cuando la vieras en el desayuno la invitarias a salir. No podías esperar.

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