III

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—¡Mira! ¡Jungkook-ah! Son piedras del bosque Shiling*!  —Grito exaltante, Hoseok mientras observaba emocionado dichos objetos, la verdad Jungkook era muy inteligente y a simple vista notó que estas rocas eran falsas y estas eran unas simples rocas que seguramente el hombre de la tienda ambulante se encontró por ahí.

—¿Shiling? ¿De kunming?... si estoy en lo correcto ese bosque es parte de la zona china y solo los sucesores del rey tienen el privilegio de pasar por ahí, no creas lo que te dicen, hoseok, es una estafa.— Mencionó jungkook inspeccionando las rocas que estaban en las cajas, si, eran falsas.

Unos días después de haber llegado al gran palacio del Seul, Jungkook y Hoseok quisieron conocer la hermosa ciudad y lo que está podía ofrecer... Habían cosas tan exóticas y finas así como cosas falsas, pero con un buen ojo y conocimiento; uno no caía en los hechos.

—Yah, Jungkook-Ah. No me dejas comprar nada porque lo clasificas como inútil, costoso o falso, no seas tacaño.

—No soy tacaño, solo estoy viendo donde no estafar mi dinero, si quieres te invito a comer ¿eh?

—¿En serio?

—No.

—¡Jungkook-ah!, No seas así, juegas conmigo y mis sentimientos...— Dijo Hoseok con verdadero pesar y un puchero.

—Era broma, era broma. ¡Claro que te llevare! Vamos, Vamos.

Comenzaron su camino y ambos encontraron algunos lugares que se miraban bonitos y elegantes a simple vista, y decidieron por uno que les pareció interesante, al parecer habían obras, historias y espectáculos en vivo. Muy interesante, a decir verdad.

—Wow~ Es lindo y la comida sabe bien, Tienes buen ojo ¿eh? —Era cierto, Jungkook tenía buen ojo para las cosas, realmente el era un chico muy talentoso, que a cualquiera le sorprendía sus niveles de astucia.

—Te dije que no era un tacaño, lo que pasa es que tu te dejas estafar —Dijo con una sonrisa mientras jugaba con su amigo.

—... —Suspiro, su sonrisa que portaba desde que ambos salieron se fue poco a poco, empezó a pensar una vida ahora sin Jungkook, el creía que el rey se encontraba a punto de morir y eso significaba lo mismo para jungkook, era tan triste, tan injusto... Tan cierto.— Jungkook, no, no quiero... Estar sin ti, ¿Qué haré?

—Tranquilo, siempre estaré contigo del alguna u otra forma, hope.— Pero Hoseok ya se encontraba llorando, él era muy sensible a decir verdad, demasiado, además que adoraba a Jungkook como su todo; se crío junto a él, Jungkook sólo lo miraba con una triste sonrisa mientras le sostenía la mano en la mesa.

[...]

—¿Raciones de comida para las personas necesitadas?

—Si.

—¿Entrenamiento y equipamiento más moderno para los soldados?

—Si.

—¿Memorándums terminados?

—Sí, mi rey.

—¿Ningún papel extra?

—No, todo esta listo.

—Ok, llámame entonces al santo niño, tiene que revisarme diario de ahora en más ¿Está bien? Para que no allá sospechas sobre mi enfermedad.—A decir verdad estaba en lo correcto, las medicinas en esa epoca apenas se encontraban avanzando en el mundo, así que no debían perderle la salud a una persona en ese estado, y menos si hablamos de un rey.

"Si, mi rey" KTH &JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora