Capítulo 4. "Byers y a pedir dulces".

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Pov's _________.

Los vecinos nos habían invitado a una cena en su casa como bienvenida. No tenia ganas de ir, sólo quería que alguien me pusiera pegamento en la cama para nunca levantarme. Tenía tanto sueño que podría dormir durante los próximos 20 años.

-Vamos en 20 minutos _________, cámbiate.

-Agh, ¿no me puedo ir así? - pregunté con súplica en mi voz.

-¿Con pijama? ¿Con los cabellos de bruja que traes? No. Si no te levantas de ahí no te dejaré salir con Max ni en bicicleta hasta que cumplas los 20.

Y después se fue. Me tuve que levantar. Agarré lo primero que encontré y me lo puse.

[•••]

Llegamos a la casa y antes de tocar papá nos hizo prometer que nos portaríamos bien.

Los tres asentimos.

Una señora que se presentó como Joyce Byers, nos hizo pasar. Ahí estaban los dos chicos.

-Ellos son mis hijos, Jonathan y Will-Dijo señalando primero al mayor y después al menor.

Papá hizo lo mismo con nosotros.
La cena transcurrió con normalidad, nuestros papás hablaban y hablaban de cosas aburridas para nosotros los menores. La señora Joyce lo notó.

-Jonathan, ¿porque no te llevas a los niños a ver una película?

El chico mayor asintió y nos dijo que lo siguiéramos. Jonathan sacó unos discos y empezó a hablar con mis hermanos.

-No sé de que les gusten, pero traje de variedad, ustedes escojan.

Miré a Will, traía un dibujo.

-¿Dibujas?-Me atreví a preguntar. Él me miró, pero antes de que pudiera responder Jonathan habló.

-¿Qué estás dibujando? ¿Niño zombie? ¿Quién es niño zombie?

-Yo-Respondió Will.-Me llaman así en la escuela.

-¿Porqué no me dijiste nada, Will? -Preguntó su hermano. -Puedes decirme lo que quieras.

-Deja de molestarme-Le contestó Will. ¿Porqué lo llaman niño zombie?

-¿Qué?

-Cómo todos los demás, como si yo tuviera algo malo.

-¿De que hablas?

-Mamá, Lucas, Dustin, Mike, tú. Me tratan como si me fuera a quebrar. Como si fuera un bebé.
Me hacen sentir cada vez más raro.

-No eres raro-Respondió Jonathan.

-Lo raro es divertido- Miramos a Aiden, quien había hablado.

Entendí su punto.

-¿Sabes qué? El niño tiene razón -Dijo Jonathan.

-Sí, lo normal es aburrido. Lo raro es mejor.-Dije.

-Ser raro es lo mejor. Yo soy raro.-Habló otra vez Jonathan.

-¿Por eso no tienes amigos?-Preguntó Will.

Iba a reír, hasta que recordé que Max es mi única amiga. Mejor cierro la boca

-Yo sí tengo amigos, Will.-Le respondió Jonathan.

-¿Y entonces porque siempre estas conmigo?

-Porque tú eres mi mejor amigo.

-Además, tienes amigos... -¿Debía decir acosadores, como les había dicho Max?-Raros. Y por lo que vi, son geniales.

-¿Entiendes lo que decimos?

-¿O acaso quisieras parecerte al tal Troy?-Pregunté.

Will puso cara de asco. -¡No!

-¿Entiendes? Lo normal en este mundo no es lo mejor.

Llamaron a Jonathan, era una voz de hombre que no reconocí.

-Ahora vuelvo.

Mis hermanos seguían hablando de no sé que cosa. Volteé hacia Will.

-Perdón si te molesto pero, algo que no entendí, ¿Porqué te llaman niño zombie?

Él sonrió, -Es una larga historia. Y no es muy bonita que digamos.

Entonces entró Jonathan con un señor, y preguntó que si queríamos ver una película que a mis hermanos les encanta.

-¡Sí!-Celebraron todos. Al parecer soy la única que no la ha visto.

-Después te cuento.-Susurró Will en mi oído. Después se nos unieron los demás.

[•••]

Esta vez si me había levantado temprano, dejé a mis hermanos en su escuela y tranquilamente caminé hacia la mía. Me permití un rato observar Hawkins, había algo... El bosque, Will... Una punzada en la cabeza me hizo volver a la realidad, y de repente me dio un escalofrío. Recordé que tenia que buscar al tal Mike para ir por unos papeles de sus padres que le tenia que entregar a los mios.

Seguí caminando.

-Creo que no-Levanté la vista al escuchar esa voz. Will, estaba con sus amigos alias los acosadores vestidos de caza fantasmas.

Espera, ¿Qué?

-Nadie quiere ser Winston amigo.-Dijo un moreno.

-¿Qué tiene de malo Winston?

-¿Qué tiene de malo? Se unió tarde al equipo, no es gracioso, ni siquiera es un científico.

-Pero es genial-Dijo uno de ellos.

Dejé de prestarles atención al ver que nadie se había disfrazado.

-Rayos...-Dijo el moreno al percatarse de la situación.

Reí, los acosadores de Max son tontos, pero graciosos. También raros, pero creo que son geniales.

[•••]

Me encontraba buscando algo para mi disfraz, me iba a vestir de bruja, encontré un vestido negro, de mangas hasta los codos y abajo de las rodillas, me puse unos tenis del mismo color y me alborote el cabello, o bueno, más de lo que ya lo tenia. Y finalmente me puse un sombrero del mismo color del vestido.

-¿Vas a un funeral o a pedir dulces?

Le enseñé la lengua a Aiden, luego tocaron la puerta. Fui a abrir.

Era una niña no pasada de los 7, y detrás de ella veían tres más.

-¿Aquí viven Aiden y Jack? La maestra Laura nos esta esperando.

Ellos iban a salir a pedir dulces con los de su salón.

Antes de que pudiera responder la dos salieron corriendo de su habitación.

-¡Sí! Aquí vivimos. Ya nos vamos.

Cerré la puerta detrás de ellos. Iba a ir a pedir dulces con los acosadores de Max, el rizado de estatura más baja -no recuerdo como se llamaba- me había dicho que los acompañara ya que también iría.

A pedir dulces se ha dicho.

Stranger Things. {Will Byers y tú}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora