˗ˏˋSintax Errorˎˊ˗ [Kamisama Hajimemashita]

24

Estaba junto a él, tomé un sorbo de mi té, ¿siempre había sido tan brillante el plateado de su cabello? No lo sé, pero... No me había fijado antes, ya.

-oye... Antes tenías el cabello largo, ¿no?- él asintió- ¿y?

-no es nada, me parece un poco triste...

-¿Qué? El cabello vuelve a crecer

-es solo... He estado pensando en dejar mi cabello crecer un poco más.

-tu cabello está hasta tu cintura, ¿no es bastante largo ya?

Hice círculos en el suelo mientras veía un mechón de mi cabello que se alcanzaba a divisar a mi izquierda- supongo... Siempre lo tuve corto, en realidad

-vaya, pues bien

-tu cabello es como la luna, Tomoe- él me miró- mi cabello no es redondo, tienes los ojos dedeformados- lo miré -intentaba decir que es del color de la luna, Tomoe- dije lo más seria que pude.

-y el mío es así- dijo señalando su cabello- tuyo es así- señaló el mío.

-¿eh?

-solo es cabello-

Tomé mi cabello con mis manos y lo peiné con los dedos un poco, de forma que pudiera dividirlo y manejarlo. Comencé a trenzarlo. Tomoe me veía atento, era gracioso.

-¿qué es tan interesante?-dije sin mirarlo si quiera.

-tú-dijo, su voz era monótona. Lo miré y tomé como pude los tres mechones con diferentes dedos mientras señalaba mi pecho en señal de esperar una simple confirmación.

-no, tu cabello, es largo y sin embargo nunca lo vi en un peinado-dijo tomando de su taza mientras miraba a otro lado.

-ah... Es por mis orejas...- él tragó y dejó la taza rapidísimo, diría que inhumanamente, pero no somos humanos, que buen chiste. Se dio la vuelta, no veía su cara.

-este...- me sonrojé sin entender bien del todo, me tapé las orejas como pude. Todavía la trenza a medio-hacer en la mano.

Vi que Tomoe temblaba un poco, uno de sus brazos estaba cubriendo el rostro.

-¿estás bien?-dije terminando de una vez la trenza.

-"es por mis orejas"...-dijo como pudo, le había dado gracia e intentaba mantener la compostura, la seriedad pesaba menos que mi comentario.

Luego de luchar con la risa en dos minutos posteriores infinitos, mientras yo lo miraba con atención, él se aclaró la garganta y me miró con una sonrisa que era visiblemente sincera, tan sincera que era involuntaria.

-¿Qué tienen tus orejas? Te sirven para escuchar y oír

-¿y qué?

-si cumplen su función no es necesario que sean estéticas, al fin y al cabo, gracias a ellas oyes

-"me cortaron un pedazo" ¿eso quieres que te diga?- dijo al fin revelando sus orejas, haciendo que Tomoe viera como, sin exagerar, carecía de un trozo de su oído, mientras que los bordes eran adornados por una cicatriz.

-si, creo que si...

°Revisado y Editado°