˗ˏˋSintax Errorˎˊ˗ [Kamisama Hajimemashita]

25

"Esa mañana fue la decisiva, me di cuenta de todo... Yo era la única..."

Estaba intentando despertar a Nanami, la moví de un lado a otro despacio, es horrible ser despertado violentamente...

- Nanami, despierta- ella gimió- cinco minutos...-

- en cinco minutos Tomoe me hace una zancadilla y te mata siete veces antes de que yo me de cuenta de que me estoy cayendo...-

- por lo menos tú eres amable...- dijo con una risita nerviosa, aún sin abrir los ojos. Eso me dio una idea, algo vulgar en mi opinión, pero podía funcionar.

Le di un beso en la mejilla.

- ¡Aoi!- ella gimió mientras se tapaba completamente avergonzada haciéndose ver como una bolita- es viernes, yo te levanto por las buenas, ahora, si quieres que Tomoe...- ella me interrumpió, después de todo ése era el plan- ¡no! Tú me despiertas tranquila, él no, él es molesto...-

- entonces levántate o te besaré en las orejas y eso si te va a molestar, Nanami- dije amenazante, el método era vergonzoso, pero teniendo en cuenta que yo ya la había besado... En fin.

- ¡Aoi, dijo Tomoe que te apures o van a llegar tarde!- comentó Mizuki sin previo aviso, a todo ésto, no lo había visto hacía eso de tres días... En realidad no hablábamos mucho- voy...- dije.

Segundos después, Nanami se levantó murmurando algo:

- de todas formas te besé a ti, a Tomoe y a Mizuki también... Un beso en la oreja no... Será tanto sufrimiento...- Mizuki me miró expectante, efectivamente esperando a que me excusara con algo.

En fin, en ése preciso momento me percaté de que Nanami y Tomoe tenían una relación bastante profunda antes de mi llegada, Mizuki había sentido mucho hacia su diosa y yo era la única... La única de los cuatro que no se había enamorado.

Aunque si quieres mi opinión, mi miembro favorito del templo era Tomoe, ¿quién más se toma la molestia de quedarse a tomar un té junto a alguien así, a esas horas de la noche a escuchar tus problemad? Para ser sincera, Tomoe me había sonreído antes, con ironía, pero durante las noches en las que hablábamos, casi todas, él en ocasiones sonreía tan sinceramente...

°Revisado y Editado°