FAMILIA

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CHESTER

Había logrado millones de cosas en mi vida, quizá muchas de ellas no las merecía, pero estaba agradecido con la vida. Era un afortunado por cada maldita cosa que tenía.

Una familia.

Mi propio club.

A mis hermanos reunidos.

Era todo lo que algún día planeé, incluso mejor, claro que mi mujer era parte de ello. Mi vida era increíble y era por ella que yo respiraba. Su corazón sin duda era lo más valioso para mí, fue por ella que todo esto se hizo posible. Sin ella nada hubiera pasado.

—¿Puedo cargarla? —escucho cuando mi vida le pregunta eso a la mujer de mi hermano, Cristopher.

Su hija accede a ir con mi preciosa mujer y ella la sostiene feliz.

—Tu mami dice que eres una dulzura. ¿Es así?

Una risa sale de su boca y mi vida se derrite.

—Mami no le estés tocando —reclama mi pequeño terremoto de nueve años de edad.

—Eva.

—Tú eres mi mami, no de ella.

Levanto a mi hija en brazos, ella pasa sus brazos alrededor de mi cuello; muy enojada y furiosa.

—No debes ser celosa, Eva. Ella es tu prima, se llama Harmony.

—No me gusta.

Mi vida ríe y se acerca a nosotros. Eva parece menos molesta cuando su prima le sonríe, beso la suave mejilla de su rostro y ella me abraza con mucha más fuerza.

>>Igual no puede jugar con nosotros, es muy pequeña, mamá.

—Lo es, por eso debemos cuidarle todos nosotros. Apenas tiene 2 años, Eva. Tú eres mucho más grande, debes cuidarla.

Mi hija hace una mueca, pero accede, su mano agarra la de la pequeña y la dejo en el piso. Eva sostiene su prima, justo entonces la hija de Hunter corre hacia ella y agarra su mano libre.

—Eva es un poco celosa —admite Gaia.

—¿Un poco? Eva es como tener tres hijos llenos de adrenalina y locura. ¿Me pregunto a quién saldría? —dice mi mujer. Gruño y la llevo a mi pecho.

—Jodidamente amo eso de mi hija.

—Lo hago también —exclama mi vida y rosa sus dedos en mi cabello —. Me gusta corto, eres muy sexy.

Gruño mientras devoro su boca, mi mujer me aleja un poco y yo no dejo de sostenerla contra mí.

—¿Qué nos depara este día? —pregunta Gaia.

—Estaba pensando en ir disfrutar de la piscina y azar algunas carnes para el almuerzo —mi mujer comenta la idea mientras mis hermanos la escuchan con atención.

—No tengo problema con eso, es una buena opción —Luh.

—Muy de acuerdo. Así los niños se divierten un poco —interviene mi hermana. Dejo que mi mujer organice todo y sigo devorando mi comida.

—¿Pudiste hablar con...? —Antes de que Hunter siga, Cristopher se sienta a mi lado. La esposa de Hunter se levanta cuando uno de sus hijos la llama, y nos deja solos.

—Decías.

—Sí has localizado a Hades.

Cristopher toca el puente de su nariz, luego nos mira.

—Es imposible que entienda de razones. Ha tenido un año de mierda, Gaia quería hablar con su mujer, pero Hades se mantiene muy alejado. Su finca está repleta de seguridad, su club nunca nos dejará entrar.

ELLAS MC Donde viven las historias. Descúbrelo ahora