Capítulo 6. Macarra

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Rose Weldon POV'

La tenía delante de mi, a la mujer que con apenas siete años de edad que tenía me abandono, dejando a mi padre y a mí con deudas y casi en bancarrota por sus caprichos y enfermedades.

Clarise Jones, mi madre, es alcohólica y es duro verlo cuando vas creciendo y que cada vez que le digas 'Madre deja la copa en la mesa' te responda con un simple 'Solo es una copa Rose'. Esa conversación lo he escuchado tantas veces, se a repetido innumerables veces.

Cuando se fue de casa me dirigió una mirada de lástima y con aquella se despidió de mí, me dejó en el umbral de la puerta con una cara desencajada, sin entender porque me miraba de aquella manera y se marchaba con una maleta en sus manos. Padre me dijo que ella se iba a un viaje que iba a estar bien, desde aquél día mi vida se tornaba al rededor de mi padre, el estuvo siempre para mí y me educo lo mejor que supo con ayuda de la abuela Arlie.

No la había vuelto a ver desde aquella escena de despedida y no la añoraba, nunca hizo un papel de madre para mi.

"Hola" Dije con dificultad, como si respirar se me hubiera olvidado de como hacerlo.

Llevaba un vestido azul cielo que le llegaba hasta las rodillas con un cinturón decorativo en su cintura a juego con unos tacones dorados bajos, tenía el pelo recogido en moño perfecto y en sus manos se observaba un pequeño bolso.

"Rose, has crecido tanto" La mujer llamada Clarise dio unos pasos en mi dirección con intención de abrazarme. Pero retrocedí. "Rose solo quiero abrazarte, hija" Dijo apenada de mi reacción.

"Tu nunca has sido mi madre" Le dije mirándole a los ojos, con rabia.

En esos momentos ya me encontraba aferrada al brazo de Blake y como ver que él miraba la escena atónito, no entendía nada.

"Por supuesto que si he sido y soy tu madre. Hazme el favor y baja la voz, no quiero que llamemos más la atención" Dijo mirando hacía ambos lados y mirando a la gente que se pasaba por nuestro lado.

"Nunca has sido la madre que merecía, una madre no abandona a sus hijos" Dije tornando los ojos en su dirección y con la respiración aceleraba.

"Señora, creo que debería alejarse de Rose" Dijo Blake colocándose delante de mi.

"Rose, dile a este macarra que se aparte de mi vista y vallamos hablar" Dijo Clarise con una voz más autoritaria y arrugando el ceño cuando pronunció 'macarra'.

"Señora, no le he faltado el respeto" Dijo Blake cogiendo una respiración pero notaba como sus pulsaciones aumentaban. "Todavía" susurro.

"Clarise, no tengo nada que hablar contigo así que por favor, déjame irme" Le dije con un tono más alto.

"Rose no me levantes la voz, merezco respeto" Hurgo en su bolso y me extendió una tarjeta. "Cuando estés preparada llama este número y pregunta por mí" Hablo más calmada.

"Respeto merece su hija, no usted. Vamos de aquí Rose" Dijo Blake tirándome de mi hacía el coche.

Miré a Clarise y cogí la tarjeta, volví mi cuerpo hasta el coche de Blake que ya había arrancado el coche. Subí al coche, en el asiento que anteriormente me había sentado y por la ventana del coche miré por última vez aquella mujer que hacía trece años no la veía.

...

"Aquí es" Le señale a Blake la casa pequeña blanca que había mi derecha.

Aparco el coche enfrente de la casa de mi abuela.

"Siento haberte causado estos últimos problemas" Dije en voz alta mirando mis manos como se aferraban al dobladillo de la camiseta.

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