Mientras el reloj siga girando. Libro 2° Trilogía "Hilos del Destino"

Capitulo X- Pelea o muere.

Capitulo X-

Pelea o muere.

Torre Stark.

-Okey. -dijo Steve quien se levantaba de la silla en la cual estaba, sus ojos más que abiertos mostraban el asombro que quería ocultar, se alejo unos pasos y puso sus manos en el pantri de la cocina mientras movía la cabeza en forma de negociación.- Lo sabia... -se dijo después de unos momentos en silencio, girando para encarar al ahora Stark del futuro-. Lo sabía, sabía que eras tú.

-No del todo Steve. -repuso mientras desviaba su mirada de Steve, él otro solo pudo fruncir su ceño y volverse a sentarse, algo le decía que eso solo era la punta del iceberg-. No mentí cuando dije que yo había recibido lo que merecía en el futuro. -Stark tomo la tasa de café y la quebró en la orilla de la mesa, tomo uno de los pedazos de la taza y extendió su mano izquierda haciendo un corte profundo en el antebrazo y a pesar de eso su brazo no sangro, Steve solo lo contemplo sin creer lo que estaba haciendo Stark-. ¿Vez? este cuerpo es solo un cascaron, pues mi verdadero cuerpo es ahora inservible. Veras, luego de tu muerte tu cuerpo fue raptado en el transcurso del viaje, a las semanas de esto tu... -Stark mordió sus labios, en verdad no quería seguir hablando de eso más debía hacerlo, por el bien de sus personas amadas-. Más aliados vengadores y no vengadores empezaron a ser asesinados, algunos que aun agonizaban al momento de ser atendidos pudieron dar una descripción del responsable de todo eso y ellos te describían a ti Steve, cuando me entere de esto empecé a buscar tu rastro, no me costó mucho encontrarte porque el siguiente en tu lista era yo... Cuando tu... apareciste... -habló entrecortado tratando que su voz no se quebrara ante esta ultima revelación-. Tú traías en tus manos la cabeza de Peter... -y tras esto el silencio volvió a reinar, Steve se puso pálido y su corazón dejo de latir por un momento, aun con los pocos días que llevaba de conocerlo él podía asegurar que amaba a Peter y saberse que en el futuro él lo había asesinado, lo hacía sentir como una basura o cosa peor, Stark solo seco sus lagrimas tras el recuerdo de ver a su hijo muerto y levantando la vista prosiguió-. Cuando entraste a la torre me tiraste la cabeza de Peter y me golpeaste como a un saco de boxeo, yo no podía poner resistencia, mi cuerpo no reaccionaba. Cuando estaba a punto de caer en la inconsciencia por los golpes recibidos tú sacaste mi reactor de mi pecho y me tiraste desde el balcón de la torre, por si no moría por los golpes de seguro la caída si me mataría. -bromeo fingiendo una sonrisa que fácilmente se esfumo de su rostro al seguir hablando-. Lo último que recuerdo es haber visto tu rostro, tus ojos eran de un azul tan oscuro y luego de eso solo oscuridad. Cuando desperté estaba en la mansión de Vincent, Loki estaba ahí y al lado de mi estaba mi antiguo cuerpo el cual habías destrozado, y yo ahora estaba ocupando este cuerpo. -dijo extendiendo sus manos en señal de mostrar su cuerpo-. Ellos me explicaron que habían hecho uno de los conjuros prohibidos para traerme de regreso, la transfusión o trasmutación de almas, realmente no entendía de eso aun ahora y lo único que entendía en ese momento es que aun seguía vivo, que Peter había muerto y que tu... Bueno, tú eras uno de los malos ahora o mejor dicho tu cuerpo era el malo ahora, teníamos un plan y por eso me trajeron devuelta... 

-Ya veo... -dijo Steve quien se volvió a parar y puso una mano en su cadera y la otra se movía sobando sus labios y mejilla, Steve iba a agregar algo cuando unos destellos por fuera del penthouse hicieron que girara a ver qué era eso, Stark lo imito y su boca se abrió a más no poder, eran los chivos expiatorios de Tyr.

-Ya están aquí. -exclamó acercándose a Steve, una luz verdosa se apodero del living de la torre y en medio apareció Loki y Thor, el primero sujetado de la cintura por el otro ya que aun no tenía la magia suficiente para hacer grandes traslados.