Señor presidente, no me casare de nuevo con usted

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La mudanza de Gu Xian había sido rápida, fácil y discreta.

Gu Xian empezó a acomodar sus cosas en mi dormitorio con gestos rápidos y precisos. En los lugares que había dejado para él.

-¿Estas segura de que no te importa que este en tu dormitorio?-Gu Xian se giro y me miro con un gesto algo raro

-Tengo a tu bebe en mi interior, creo que es un poco tarde para mostrar vergüenza por dormir en la misma cama-dije de manera suave mientras recolocaba un par de cosas, ligeras y sin necesitar que alzase mucho los brazos

Al parecer el hipercontrolador con el que iba a vivir a partir de ahora se estaba leyendo absolutamente todos los libros de cómo evitar situaciones de riesgo durante el embarazo. Y por la cantidad de posit se los estaba releyendo muy en serio

-Siéntate, te estás moviendo mucho

-Por el amor del cielo, hice una mudanza completa yo sola cuando estaba embarazada de Cheng Tai y no me paso nada. Estoy bien

-En cuanto acabemos de ordenar le diremos a los niños que van a ser hermanos mayores

Me maree y me tumbe en la cama antes de ver su sonrisa de superioridad. Ese maldito lo hacía adrede porque sabía que sentía pavor a decírselo a su hija, aunque no comprendía el por qué de mi miedo.

-¡Te concedo este punto! ¡Pero ningún otro!-dije con voz firme alzando mi puño al cielo con un gesto decidido

-Nada de movimientos bruscos

-¡A este paso estaré en reposo absoluto sin que lo diga el médico!

-No me tientes-dijo Gu Xian con una sonrisa que debía de ser picara, pero que no se sintió de esa manera. Más bien se sintió como una promesa silenciosa de ponerla realmente en reposo absoluto

¿Por qué Gu Xian daba tanto miedo ahora mismo?

Bueno, también me sentía feliz de que se preocupara tanto por mi y por el bebe, pero esto rozaba lo obsesivo, si no lo alcanzaba ya

Me quede de pie, dando vueltas. Los dos niños estaban sentados en la cama de Cheng Tai, mientras nos miraban

Era algo raro ver a Gu Xian tan nervioso. Era bueno ver que no era invulnerable.

-¿Hemos hecho algo malo?-dijo Cheng Tai

-No, no cariño. No habéis hecho nada malo

-¿Nos vais a castigar?-la que hablo fue Gu Ding Ling

-No, no habéis hecho nada malo, así que si os castigásemos por no hacer nada seriamos muy injustos- Gu Xian suspiro

Dejarles hacer las preguntas por si mismos estaba funcionando bastante bien. Aunque la parte más fuerte tendría que ser dicha de una manera más... Directa. Dado que era poco probable que los niños lo preguntaran

Eso sería un alivio para nosotros, los padres, que no sabíamos cómo sacar el tema a pesar de que lo habíamos discutido y practicado. Esto era peor que intentar decírselo a nuestros padres

-Veréis, a partir de hoy... Vamos a ser una familia- Gu Ding Ling me miro fijamente. Mierda, ¿Estaba sudando?

¿Por qué enfrentarme a esta niña de tres años era más aterrador que enfrentarme a mi ex marido?

Gu Xian tomo el relevo al ver que me había quedado parada. Más bien me había convertido en la rana que era vista por la serpiente. Serpiente que ya tenía las mandíbulas abiertas y le estaba goteando veneno del colmillo, si soy sincera