Quatre

312 41 8
                                    

Hacía tiempo que no visitaba la casa de mi padre, realmente me matarían aquella tarde. Estaba demasiado ocupada con asuntos del trabajo y con otorgarle tiempo de calidad a mi novio cuando estaba en casa. Pero ese día me había dado la obligación de ir a visitarlos.

Toco el timbre al menos tres veces, y espero con cierto malhumor por la brisa helada y húmeda que chocaba con mi cuerpo. Odiaba el invierno, detestaba sentir el frío clavarse en mi cuerpo cual espinas. Al poco rato Hosoek se hace presente, como siempre con una amplia sonrisa en su rostro.

— ¡Bunny Bae! —Me recibe con mucha alegría, extendiendo sus brazos y luego abrazándome.— Te he echado de menos.

— Yo también Hobi. —Sonrío.

"Bunny Bae" era el apodo que Hoseok usaba siempre que me veía. Había decidido llamarme así porque amaba rescatar conejos cuando era pequeña. Algunos quedaban atrapados en pequeños pozos en la tierra, algunos sujetos a algún alambre o simplemente extraviados.

— Pasa, pasa por favor. —Con velocidad se hace a un lado para dejar libre paso al interior. Asiento levemente y camino hacia la sala principal.

—¡Cielo! ¡Es bueno verte otra vez! —Mi padre rápidamente se levanta del sofá en el cual yacía sentado y camina hacia mí con los brazos extendidos.

Correspondo su abrazo y posteriormente besa mi mejilla con ternura.— Hola papa, te he extrañado mucho.

El me mira con los ojos brillosos.— Yo igual. No puedo creer que mi niña haya crecido tanto. Ya eres toda una mujer.

Oigo pasos ajenos en la sala, lo cual me hace instantaneamente deducir que se trata de Jinah, la esposa de mi padre.

— Helen, cariño. —Expresa con suma alegría al verme y camina con velocidad hacia mí.— Qué alegría volver a verte.

— Agradezco a todos la paciencia. —Contesto observando a todos con una pequeña sonrisa.— He estado ocupada este tiempo, realmente me disculpo. —Hago una reverencia y ellos ríen levemente.

— Hija, sabemos que tienes responsabilidades. Aceptamos que no puedas visitarnos muy seguido.

— Quédate a cenar, Bunny Bae. —Hoseok me abraza por detrás con ternura y yo sujeto sus brazos en respuesta.

— Me parece una excelente idea. —Añade con una sonrisa Jinah, mientras camina hacia la cocina. —Hoy tenemos Jjajang myun*.

La mesa estaba repleta de comida, tanta que sentía que pronto las fuentes desbordarían. Observo a Hoseok y sonrío. Come como un animal y mi presencia tampoco lo detiene.

— Cuéntanos Helen. ¿Cómo va el trabajo? — Pregunta papá colando un bocado.

Hago una mueca. — Regular, creo. —Jugueteo levemente con el tenedor abre el plato—. Al menos me han asignado un caso, es un gran avance.

— ¡Pues claro que lo es! —Sonríe Jinah aplaudiendo levemente—.  Sabemos cuán difícil ha sido para ti adaptarte a las injusticias aquí.

— Sí, eso realmente es una buena noticia. Pero lo que lo vuelve regular es el caso mismo, pues es una situación muy complicada.

Hoseok con los ojos muy abiertos y los cachetes inflados de comida me observa. — ¿Es el tipo del que todos hablan? ¿El culpable de las últimas muertes de mujeres este año? 

Lo miro y niego levemente con la cabeza. — No sólo de este año, Hobi. —El rostro de los demás en la mesa se desfigura—. Es algo que viene de años,  creemos el responsable de todo asesinato causado en la ciudad hacia mujeres.

— ¿Cómo saben que sólo son mujeres?  

— Hoseok, mi deber es no revelar datos relevantes mientras el caso aun no esté cerrado.

— Lo siento. —Hace un pequeño puchero y continúa comiendo.

— Oh, querida. —Jinah extiende su mano sobre la mesa y acaricia la mía—. Podrás solucionarlo, eres muy capaz.

Sonrío en respuesta y oigo a papá aclarar la garganta a su lado. — Casi olvido algo muy importante. —Arrugo el entrecejo confundida—. Sabes que mañana es el cumpleaños de Hoseok, ¿Verdad?

Mi rostro se desfigura y rápidamente sujeto con ambas manos mi cabeza. Arrugo los ojos. — ¡Uhg!, cuánto lo siento... He estado con tantas cosas en la cabeza que lo he olvidado por completo.

— ¡Que malvada eres! —Mi hermanastro contesta haciendo puchero y hablando como niño pequeño a pesar de cumplir casi veinticuatro.

— ¡Está bien!... —Intenta apaciguar Jinah con una humilde sonrisa—. Lo que queríamos hacer era informarte sobre ello.

— ¿Informarme?

— Sí, hija. Hoseok decidió festejar su cumpleaños invitando a toda la familia y amigos a nuestra casa. —Habló mi padre.

— ¡Oh! Que estupenda idea. —Sonrío mirando a mi hermanastro y él también sonríe.

— Talvez luego también salgan a divertirse y demás, pero la cena familiar siempre está primero. —Jinah agrega.

— Te esperamos mañana a las ocho aquí en casa. Queremos hacer una cena, no muy hostentosa pero trataremos de que sea cálida y familiar.

— Con gusto me apunto. —Sonreí.

...

—¿Hoseok también invitó a Yoongi? —Mi mueca de desagrado se hace cada vez más visible.

Taehyung se acuesta a mi lado en la cama y acaricia mi brazo. — Sí, bebé. También es amigo suyo.

— Hobi es amigo de todos. —Contesto desganada y me cruzo de brazos. Él sonríe ante mi reacción y posteriormente acerca sus labios a mi cuello. Lo besa con suavidad y un cosquilleo instantáneamente recorre mi espalda.

— Me encanta cuando pones esa cara. —Gimotea sobre mi piel y sonrío.

—¿Cara de enojada? ¿Acaso te gusta verme irritada?

— Es gracioso ver como se te forma una arruga en la frente cuando lo haces.

— ¡Hey! —Lo golpeo levemente en el brazo y él carcajea.

— Hablando en serio, Helen. Deberías aceptar que Hobi también quiera invitar a Yoongi. Después de todo tú y él son compañeros de trabajo, no tiene nada de malo.

— Lo sé, amor. Pero Yoongi no es alguien que quiera ver incluso fuera del trabajo.

— Sabes que sus bromas no van en serio, ¿verdad? —Me observa con cierta picardía.

— Vive burlándose de mí. Lo quiero y demás, pero por momentos no lo soporto.

— Creo que deberías darle la importancia que realmente merece, e ignorarlo por completo si eso te deja tranquila.

— Está bien... —Suspiro acomodando las sábanas sobre mi cuerpo. Ambos nos acostamos mirándonos mutuamente—. ¿Sabes de alguien más que haya sido invitado aparte de nosotros y el idiota de Min Yoon Gi?

Tae vuelve a sonreír. — Estoy seguro que Nam y Jin también irán. Por otro lado, hoy hablé con Hobi por teléfono y me dijo que vendrá su primo de visita.

— ¿Primo? —Arrugo el entrecejo sorprendida—. ¿Hoseok tiene un primo?  Realmente no lo sabía.

— Es común que no lo sepas. Son familia pero no completamente. Él dijo que es un primo que viene de otra ciudad.

— Oh, pues mañana será un caos con tanta gente.

— Trata de dormir, Helen. —Besa mis labios con delicadeza.

<<Lo necesitarás pequeña... >>

• KILLER • (J.JK)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora