My True Love (Sparia)

CAPÍTULO 22

- Ari... - Antes de que pudiera terminar la frase, cerré la distancia que nos separaba, uniendo nuestros labios en un tierno y suave beso.

Habían pasado algunos segundos desde que junte mis labios con los suyos y ninguna de las dos se movía. Solo manteníamos nuestros labios pegados sin hacer ningún movimiento, pero aun solo con eso sentía mil mariposas revoloteando dentro de mí.

Disfrutaba inmensamente de probar sus suaves y apetitosos labios, pero aun y con eso no podía evitar sentir miedo al pensar que tal vez había arruinado más las cosas al besarla. Así que como pude reuní fuerzas de donde sea y empecé a separarme de ella, pero no pude seguir al sentir como colocaba su mano sobre mi nuca y me atraía nuevamente a ella para besarnos. Aunque esta vez fue realmente un beso, nuestros labios encajaban a la perfección, y aunque al principio eran movimientos torpes y lentos podía sentir con cada movimiento su cariño, su amor... era como estar en un sueño del cual nunca quería despertar.

Pasaban los segundos y el beso se volvía cada vez más rápido, pasional e intenso. Sus manos viajaron de mi nuca a mi cintura y me atrajo más hacia ella. Era tan intenso el beso que podía sentir como mi cuerpo comenzaba a calentarse y mi respiración se agitaba. Ambas queríamos seguir besándonos, disfrutando del momento pero la falta de aire hizo que nos separaramos.

- ¿Así que es por ella por la que querías terminar conmigo? - Me asuste al escuchar su voz e inmediatamente dirigí la vista hacia donde se encontraba.

Rápidamente me levanté del piso para poder verlo mejor. Se encontraba parado en la entrada de la casa con un ramo de rosas y una caja que parecía ser un regalo.

- Noel yo...

- No digas nada... por favor no digas nada - Una lágrima se desliza por su mejilla -. Creo que es bastante claro lo que está sucediendo aquí.

Antes de que pudiera decir algo más él tiró las rosas y el regalo al suelo mientras daba la media vuelta para irse. Había sido tan estúpida en olvidar que había dejado la puerta de la entrada abierta.

- ¡Noel escucharme por favor! - Salí corriendo tras de él sin pensarlo dos veces.

No podía dejar las cosas así, él había sido una parte muy importante en mi vida y había estado cuando más lo necesitaba.

- Déjame explicarte cómo están las cosas por favor - Seguía intentando alcanzarlo pero caminaba muy rápido.

- ¿Explicarme que? - Se detuvo de pronto y dirigió su mirada hacia mí -. Las cosas están muy claras para mí.

- Noel, por favor escúchame.

- No, escúchame tú a mí - Me apuntó con su dedo índice.

Hizo una pausa y colocó sus manos en su cintura, comenzó a respirar profundamente intentando calmarse un poco.

- Desde el día en el que te conocí sabía perfectamente que amabas a alguien más, aun así creí que lograría que te enamoraras de mí, creía que podría hacer que te olvidaras de él... o mejor dicho de ella - Su voz sonaba entrecortada -. Pero veo que me equivocaba.

- No digas eso yo...

- ¡POR DIOS ARIA! - Paso sus manos por su cabello con frustración -. Llevamos 1año y 3 meses juntos y jamas me has dicho ni una sola vez que me amas.

Solo pude agachar la cabeza ante lo que había dicho. Tenía toda la razón, jamás en todo este tiempo me había nacido decirle que lo amaba, pero nunca pude entender por que... al menos no hasta ahora.

- Lo siento, yo no quería que pasara esto.

- Yo realmente te amo y lo único que siempre quise es que seas feliz - Suavemente me tomó de la barbilla e hizo que lo mirara a los ojos -. Pero no puedo seguir a tu lado, ni como novio... y mucho menos como amigo.

- Lo sé - Dije casi en un susurro.

Me dedico una pequeña sonrisa y se acercó lentamente a mí, pensé que me besaria pero solo junto nuestras frentes.

- Estaré rezando por tu felicidad - Me dio un beso en la mejilla y se fue.

Jamás quise que las cosas terminaran así, no quería hacerle daño a nadie y menos a él que lo único que había hecho en todo este tiempo era demostrarme su amor incondicional.

No pude evitar romper en llanto al recordar todos los momentos que habíamos pasado juntos, y ver ahora cómo habían terminado las cosas me partía el corazón.

- Lo siento... lo siento... lo siento - Decía una y otra vez mientras las lágrimas recorrían mis mejillas.