Culpables de un mismo Oasis

CULPABLES DE UN MISMO OASIS (PARTE 3)

- Entre tantas noches de aventuras, con tantos recuerdos, no sé que posición ocupa cada uno, ya no hay intensidad que se esconda en mi oscuridad. De un simple grito, acabaste con mi brillo, nadie sabe si volverá nuestro rito.

- Tu mirada a mi corazón deja grave. Me descontrola sin saber qué hacer cuando desvistes tu traje. Ahora actúas haciendo como que nada te importa, con coraje, rompiéndome en pedazos en este asalto, viendo mi piel marchitar, mi mente enloqueciéndose mientras fijas tu mirada fría marcando el final del juego.

- Mi corazón hecho trizas se reconstruye cada vez que me miras, la lujuria se apodera de mí sin dejarme decidir. Se me eriza la piel antes de que nos volvamos a fundir.
Una vez más, no te puedo sustituir y mucho menos poder huir.

- Todo este tiempo a veces te negaba por no querer sentir llorar mi corazón. Te advierto que la verdad que tenemos de frente puede quebrar nuestro amor, si eso sucede no perdemos igualmente, en tu juego no quiero tener el control.
Como el viento con su corriente voy volando dejándome llevar.

- Es difícil no querer sentir mi corazón vivir cuando en realidad hay que volver a insistir. Dos corazones quebrados que siempre volaron siendo uno, aún con lo sucedido no hemos perdido el turno.

- Escucha mi voz, oye lo que te voy a decir, nada de esta situación importa en este instante más que tenerte junto a mí y cuando no estás me mata mi mente. Prometo a cada estrella que ilumina tus noches veladas en soledad estar desde hoy. No importa quién guarde más la razón, que mis viajes en turista sean en compañía de tu corazón.