Gana mi perdón

Prólogo

En la ciudad de París.

Chat noir iba saltando de edificio en edificio, buscando a su compañera de batallas, muy preocupado, hasta que la vio y se acercó a ella.

Ladybug, estaba sentada, abrazando sus rodillas, claramente llorando por lo que se podía oír.

Tras rescatar a unos rehenes, una chica se acercó y beso en los labios a Chat noir, quien no se negó en lo más mínimo, siendo vista por ella antes de huir y llegar a éste punto.

El héroe felino, con algo de precaución, se acercó un poco a su amiga.

-My Lady, yo...

-¡No!... por favor, vete Chat, quiero... estar solá.

Pidió ella, con su corazón destrozado.

Con el pasar del tiempo, dejó de creer que Chat noir era un mujeriego, pero al parecer se equivocó y sí lo era.

Seguro que ella era uno de sus objetivos y antes de lograr su cometido, el destino le mostró quien es en verdad Chat noir.

-¿P-por qué te pones así? Tú me rechazaste muchas veces.

Y el ojiverde, tenía su voz cortada, totalmente arrepentido por lo que hizo.

En su defensa, nunca dio un beso que recordase y por la adrenalina de ése momento, correspondió al beso de ésa fan, pero ahora que se calmó, sentía asco de sí mismo.

Tanto decía amar a Ladybug y se dejó llevar por un mero impulso de momento.

-Pero nunca te rendias conmigo, aún cuando yo lo hacía... creí que tu amor era sincero, pero... me equivoque.

Susurró la chica, herida como nunca antes.

Ella siempre intentaba parecer fuerte delante de su compañero de batallas, y cuando no era fuerte, él le daba las fuerzas, pero ahora, no podía.

En éste momento, Ladybug era débil.

-Buginette...

Antes de que el chico pueda decir algo, la heroína motada se puso de pie y le mostró una sonrisa falsa, aún derramando un par de lágrimas.

-Sigamos salvando a París y ya, compañero.

Y con decir éso, la chica se fue, queriendo dormir lo antes posible para despertar de ésa pesadilla que vivió.

Chat noir, sólo se puso de cuclillas, con tristeza.

-¿Compañero? ¿Ya no somos ni amigos?

Todo el progreso que hizo con Ladybug, oficialmente se fue a la basura.

Que héroe más patético resulta ser, sí lástima a su propia líder.

-¿Por qué tengo que ser tan... idiota?

Y así, Chat noir, hirió los sentimientos de Ladybug, quien en cierto punto, también se siente culpable por haber desperdiciado la oportunidad que tuvo con Chat noir.

Continuará...
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¡Hola!

Para empezar con una historia Ladynoir, tome este tema.

Espero que haya gustado el inició y sigue "¿Quién fue?"

Gracias por su tiempo.

Volveré...