Prólogo y Advertencia

32 5 16
                                    

Aclaración:

Esta historia, es un pasatiempo, más para mí, que para ustedes(lectores).
Me gustaría que no fueran demasiado rudos si quieren leerla.
Si no quieren leerla, pueden retirarse de aquí. Si solo vienen para juzgar mal, pueden retirarse de aquí.

Subiré la historia cuando acabe de escribirla, este prólogo es solamente para marcar mi historia en Wattpad. UwU

Advertencia:

Contenido adulto específico.
Escenas no aptas para personas menores de 18.
Aquí nada es personal.

PRÓLOGO

-Me parece un gran momento para decir... Bienvenidos, sean bienvenidos a la escuela secundaria "Nort Adler"- Todos aplaudieron.

La directora Hale informaba la bienvenida a los nuevos estudiantes por el megáfono. La escuela es hermosa, totalmente blanca, con algunos retoques color rojo tipo vino tinto.

Y la directora Hale, es pálida, alta, más delgada que un poste de luz, y quizás más elegante y discreta que la reina Isabel. Con labios siempre pintados de rojo, pestañas delineadas perfectamente en color negro, ojos color caoba y cabello negro intenso. Siempre con una mirada fría, falda de abogada, siempre de gala, cabello atado en una coleta alta, siempre elegante.

Yo la conocía tan bien, puesto que ella fue mi directora en toda la primaria, antes de cambiarse a esta escuela. La escuela Secundaria privada: "Nort Adler", en Manhattan.

-Bien... Aquí vamos futuro- me dije a mi misma para alentarme.

Caminé hacia la entrada, al mismo tiempo que la mayoría, chocando con algunos estudiantes en el camino. Mientras pasaba la entrada, veía como algunos estudiantes le hacían espacio a la directora, mientras ella pasaba con megáfono en mano. Ella se situó en medio de un pasillo, largo, con paredes pintadas de color blanco, y casilleros de color rojo. Todo el pasillo repleto de puertas blancas y casilleros rojos. Vi como todos hacían un círculo al rededor de la directora Hale, mientras la miraban impacientes, esperando instrucciones.

-OK, le indicaré la instrucciones. Richard y Cole se encargarán de que todos tengan el mapa de la escuela, para su comodidad.- dijo, a la vez que señalaba a dos chicos, uno moreno y alto, con ojos verdes, cabello negro, que identifiqué como Richard. Y otro blanco, pálido natural, alto, ojos negros, cabello castaño, que identifiqué como Cole. -Al reverso de sus mapas, verán el nombre de cada salón, y cada parte de esta escuela. También recibirán una hoja con su horario, dependiendo de su grado. ¿Entendido?- Preguntó, a la vez que todos respondían afirmativamente. -Muy bien. Richard, te dejo a cargo.- le entregó el megáfono al moreno alto y se fue en dirección a la salida, caminando perfectamente en sus tacones altos.

-Bien. Síganme ordenadamente por favor.- Una voz ronca inundó el lugar. Richard había hablado.

Comenzó a caminar rumbo al largo pasillo.

[...]

Después de que Richard nos guiara a la recepción, nos dieron nuestro mapa y nuestro horario, recordándonos que teníamos que guardarlos hasta el fin de curso.

Ahora mismo acababa de sonar la campana, y yo me encuentro caminando hacia mi primera clase: economía. Lo sé, lo sé... A penas empieza el día y el universo ya está en mi contra.

Entré al salón y me senté hasta atrás, junto a la ventana, nunca me ha gustado ser el centro de atención, o siquiera que me vean, me gusta pasar desapercibida.

Todos los alumnos entraron al salón, indecisos de donde sentarse, ya que todos se sentaron, el profe habló.

-Buenos días chicos, yo seré su profesor de economía. Mi nombre es Víctor Ferguson. No hay mucho tiempo para que se presenten, ya lo harán después.

La clase pasó, lenta y dolorosamente. El profesor Ferguson era bueno en lo que hacía, solo que los alumnos éramos malos en poner atención... Bueno, solo algunos, había dos que tres, que si ponían atención. Yo entre ellos.

Sonó el timbre y todos salieron apresurados.

-Nos vemos mañana- gritó Ferguson, mientras todos salían, como cucarachas por el desagüe. -¡Señorita Jones! ¡Joven Labern!- a la mención de mi apellido, paré en seco, volteándome hacia la profesor.

Noté que otro chico también paraba, a mitad de la puerta, y se volteaba. DIOS... Ese chico de verdad que estaba guapo, era exageradamente alto, cabello castaño ligeramente desordenado; que le quedaba muy bien, ojos negros, totalmente oscuros, le daban un aire de chico malo, facciones suaves, nariz perfilada, espalda ancha, cejas tupidas, labios rosas, húmedos y carnosos.

-Mande- dijo el chico, con voz rasposa y ronca, totalmente sexi. Supuse por razones obvias que él era el "Joven Labern".

-¿Si?- dije con dificultad, recuperando la saliva que se me había caído por estar observando al Dios que estaba a mi lado.

-Por lo visto, ustedes son mis estudiantes más aplicados, aunque no participen casi nada... Pero me parece una buena idea que de ahora en adelante trabajen juntos, les dejaré un trabajo, que tendrán que hacer en pareja. Dirección me pide una pareja por grupo para competir en el concurso anual-. Vaya... -Espero que estén de acuerdo, aunque no hay tiempo para objeciones. Aquí está el trabajo, tienen un mes para acabarlo.- anonadados por tanta información, vimos como Ferguson dejaba un folder, gigantesco, sobre el escritorio, para luego retirarse por la puerta.

>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>⟩

FUEGO DE UN AMOR [FUA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora