Conociendo MINOA

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- ¿De dónde vienes tú?-le pregunto Montse a Aldo. -Mmmmm... de la tierra.      - ¿Dónde es eso?             - ¿Recuerdas que me rescataste de una caída?    -Sí.                       -Ha, pues estaba viniendo o mejor dicho, cayendo de ahí. Los dos se sentaron un rato para relajarse de lo ocurrido.                   -Y, ¿qué se siente vivir aquí?- pregunto Aldo.       -A, es una gran aventura; cada día es uno nuevo por descubrir las maravillas de Minoa, te digo una cosa, ni siquiera hemos descubierto una mitad de todo este mundo. - ¿Pero por qué? -pregunto interesado.                 -La clave de todo el descubrimiento, está en Donler, ellos tienen la llave del templo sagrado.          - ¿Qué es eso? -preguntó.    -El templo sagrado es lo que contiene todos los conocimientos de Minoa, se dice que se construyó hace 100 generaciones, pero los Donler la cerraron y se robaron la llave, planean asesinarnos uno por uno para afín abrir el templo y destrozar todo. Si logran abrir el templo, se acaba todo.                        - ¿Quién lo construyó?       -Mi tataratatarabuelo David Citaru.                     -Tu nombre es Montserrat Citaru.                 -Sí-dijo soltando una risa- ¿cómo se llama tu mundo?    -Es la Tierra, no es muy emocionante pero tiene su estilo.                     -Ya me lo avías dicho.         -Sí, pero no me has de haber puesto atención.             Se levantaron y Montse le dijo:                      -Ya se hace noche, ven a mi casa antes de que te coman los Nirame.                  - ¿Qué son los Nirame? -Animales muy veloces como de 10000 truenos que nos comen, -explicó- aparecen en la noche y la única forma de que no nos coman es que pongamos un polvo especial.      -Bueno, vámonos.             Se levantaron y fueron a la casa de Montse.

Al llegar, se encontraron con el primo de Montse, Fabio quien estaba recogiendo los desastres: Fabio era como un musulmán de los que aparecen en las ferias, con todo y su turbante, pero todos tenían de 10 a 12 años.          -Hola Montse, -dijo Fabio- ¿quién es él?             -Hola Fabio, él es Aldo,viene de la tierra.           -¿Dónde está eso? -pregunto Fabio.                      -Es que me tragó una tira de papel que tenía muchos cuentos bien interesantes, lo que me puso a pensar que estoy en un cuento, aunque no parece.                    -Que bueno, así tú vas a conocer el final de la historia-dijo Montse-.     -De hecho, eran muchos cuentos y unos como este no los conocía. -Bueno, a descubrirlo-dijo Fabio-. -Oye,-dijo Aldo- y, ¿cuál es tú "súper poder"?          -Te vas a sorprender-dijo y se sentó, serró los ojos y todas las piedras que se encontraba se ponía a su alrededor- Sorprendido, eso no es todo, puedo aventarlas con solo un movimiento o crear todas las formas. -Estupendo-dijo Aldo- es una buena defensa contra los Donler.                      - Tengo una idea-dijo Aldo-los puedo entrenar para que no tengan miedo de combatir a los Donler, claro que tendremos que decirles a todos los de Minoa para que nos escuchen, pero lo tendremos que intentar, no será fácil, pero con un poco de suerte, nos escucharán - dijo Aldo.            -Entonces, ¿qué hay que hacer?-pregunto Montse-. -Primero hay que dormir para mañana empezar a reclutar a los demás, espero que nos ayuden, -dijo Aldo- ¿dónde están tus padres?- le dijo a Montse-.                   -Se los llevaron los Donler, -dijo Fabio-por poco me llevan a mí, pero me oculte atrás de la casa. Montse comenzó a llorar de la tristeza, se sentó en el suelo y se durmió. Poco después, Aldo y Fabio se acostaron y también se durmieron.

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