Si pudieras pedir un deseo ¿Cuál sería?.
Thor lo hizo, busco la manera de que todo pudiera ser cambiado, sin importar que el pasado fuera olvidado.
Loki no es descubierto por Odín, sobrevive en el reino de los gigantes de hielo, mientras Thor es e...
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Thor camino firmemente hacia lo que él pensaba que era la mejor decisión, camino para enfrentarse al enemigo de su padre y su propio enemigo, a Laufey.
—¡Laufey! —pronunció con fuerza frente aquel gran trono
Laufey que estaba dormido, recargando su cabeza en su mano, apenas abrió un ojo, para observar, al pequeño hijo de Odín, solo sin algún compañero, algo que lo hizo hacer una mueca como una sonrisa.
—¿Eh?, ¿Qué hace el niño de Odín aquí? —cuestionó con una sonrisa burlona.
—Vengo a proponerte algo, dentro de 3 meses, se hará la más grande celebración de Asgard, es la celebración del aniversario de la coronación de Odín, todo el reino entra en jubilo, por lo cual, la vigilancia se baja, en ese momento yo puedo abrirte paso para que entres al reino, para así poder derrotar a Odín. —propuso el hijo de Odín.
—¿Qué es lo que ganaras tú en eso? —preguntó con desconfianza el gigante de hielo.
—Fácil, la corona, al morir mi padre, el único heredero, seré yo.
—Después de que mate Odín y tu obtengas la corona, ¿Qué hay de mí?
—Te ofrezco la libertad de caminar entre los reinos, a mí no me interesa, más que Asgard y poder dentro de esta, mi padre tiene muchos secretos y prometo descubrirlos todos.
—No creo en ti pequeño Asgardiano, pero déjame decirte, que, si puedo usarte para matar a Odín, no dudare en hacerlo, por lo cual, tienes un trato.
—De acuerdo.
Thor sonrió, camino entre las oscuras tierras de hielo, y antes de irse por aquel camino secreto hacia Asgard, miro hacia atrás, para observar a Loki mirarlo a la distancia.
—Volveré a visitarte —pronuncio, para después desaparecer en aquella tormenta de hielo.
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Thor miraba desde el gran balcón, observando la tranquilidad de Asgard.
—¿Quisiera poder saber qué es lo que tu mente piensa?, hijo mío —Frigga se colocó a lado de su hijo. —ya no puedo descifrar tus pensamientos
