si dices que sí.

~jamás pensé en estar en una comisaría~

Capitulo 5

- Mierda, mierda, ¿ Porque tenían que estar aquí? Mierda - Escucho maldecir por lo bajo a Dámaris

- Oye Tranquila... Que pasa?

- Los que vienen allá, - me señala con la cabeza al grupo de chicos - es mi ex con sus amigos

- ¿Y que tiene?, ¿No habían terminado bien?

- ¡No!, Ese era Alexis, este es Brian

- Hooo ya entiendo... ¿¡Cuántos novios has tenido amiga!?

- Solo dos relájate

- Shh ya están cerca - le digo en susurro

-diablo...

No logra terminar de hablar ya que la interrupen

- Hola chicas - dice Brian colocando una pierna entre Lara y yo - Que hacen aquí... Solas

- Eso no es de tu incumbencia - loe digo algo molesta y nerviosa a los vez

Uno de los 4 chicos que venían con el se sienta al lado mio pasando su brazo por mi cabeza y habla.

- Relájate linda... Solo queremos hablar

- pues mira que casualidad, nosotras no - me defendió Dámaris

- Escuchen perras, no queremos problemas así que será mejor que se relajen

- ¡NO ME LLAMES PERRA Y NO ME RELAJARE!

Brian me agarró los brazos. Intenté soltarme pero solo logré que me sujetará más fuerte. Dámaris intentó ayudarme pero los chicos la agarrón a ella también.

- A mí no me grites perra estúpida, quién te crees que eres para hablarme así

Estaba por hablar pero una voz me interrumpió.

- Oye! Ya déjala! - dijo Frank con una voz firme, el estaba con otro chico

Sentí mucho alivio al escucharlo hablar.

– Tu no te metas.

– Y tu sueltala

– ¿ Y si no quiero? – dice mientras me coloca de espalda suyo y pasa su brazo por mi cuello.

– Será mejor que lo hagas

– ¿Me estás amenzando?

Se acercó bruscamente llevándome con el. Se detuvo cuando las sirenas de un auto policial se acercaban. Los policías se acercaron a nosotros y sus amigos salieron corriendo, el hizo lo mismo pero antes me empujó haciendome caer golpeándome la cabeza el banco en el que antes estaba sentada.

– ¿Estás bien? – me pregunta mientras me ayuda a levantarme

–Si, si no fuera por qué un idiota hizo que me golpeara la cabeza. – le contesto molesta

El solo ríe.

– ¿Pasa algo chicos? – pregunta uno de los oficiales

– No, está todo bien – contesta Dámaris

– De acuerdo, de todas maneras debo llevarlos a la comisaría.

– ¡¿Que?! ¡¿Porqué?! – contestamos los 4 al mismo tiempo

– Por qué ya es de noche y son menores de edad, no puedo dejarlos a quien solos ¿Y si les pasa algo?

Esta bien, tenía un buen punto.

Los cuatro íbamos en la parte de atrás de la patrulla. Me sentía mareada.

– ¿Te sientes bien? – pregunta Dámaris