ʟᴀ ᴠɪᴅᴀ sɪɴ ᴛɪ [ᴄᴀᴄʜᴇ́] (ᴛᴇʀᴍɪɴᴀᴅᴀ)

3.

Sábado 7:30 am

El sonido de una llamada hizo que Daniela abriera los ojos dándose cuenta de que había dormido en el sillón de su sala con Ramón sobre ella. Sonrió levemente y con sus ojos achinados tomo su teléfono viendo en la pantalla un nombre que bien reconocía.

Juan Carlos<>

Se sorprendió al ver el nombre de el padre de Poché y contestó.

-¿Hola?- saludo la castaña con duda.

-Hola, buenos días Calle. Me disculpo su te desperté pero tenía que hablar contigo- contestó.

-No, no hay problema. ¿Sucede algo?- preguntó Calle mientras se acomodaba en el sillón.

-Sí, pero nada malo. Lo que pasa es que iré de viaje por un par de días a España y necesito que alguien cuide a Valentina, me preguntaba si tú puedes cuidarla.-

-Oh claro, yo la puedo cuidar los días que necesite.- sonrió recordando aquella mini Poché, tenía tiempo sin verla.

-De verdad? Te lo agradezco mucho, si quieres la llevo a tu departamento.-

-No- lo interrumpió.- yo iré por ella, hace tiempo que no los visito.

-Muy bien, aquí te esperamos y nuevamente gracias.-

-No hay de que Juan.-

Se despidieron y cortaron la llamada.
Calle había olvidado la última vez que vio a su pequeña cuñada y su tierno suegro. Luego de lo que ocurrió con Poché se veían demasiado poco. Claro que tuvo qué ver con la actitud de Calle y el no querer salir de casa, sin embargo acepto para hablar con Valentina y saber como llevaba el asunto.

...

El viento chocaba en la cara de Ramón quien había sacado su cabeza por la ventana del auto mientras se dirigían a la casa de los Garzón. Daniela sabia que Vale amaba mucho a Ramón y por ese motivo lo llevaba con ella.

No tardaron más de 20 minutos en llegar, Calle se bajo del auto y bajo a Ramón. Ambos  llegaron a la puerta de la casa y Daniela toco la puerta.
Se escucharon unos pasos apresurados y se abrió la puerta mostrando a una pequeña copia de Poché.

-Hola Val- saludó la castaña.

-Calle! Hola.- contestó enérgica la menor y abrazo a la más alta.

Valentina la hizo pasar y fueron a la sala.

-¿Y tu papá?- preguntó Calle.

-Se fue antes, su trabajo se adelanto y salio justo después de llamarte en la mañana. Me dijo que vendrías a cuidarme- respondió la menor con un poco de timidez.

La castaña sonrió y miro como Valentina acariciaba con ternura al pequeño canino.

-Claro que te cuidaré, eres como mi hermanita menor.- comentó mirándola.

La menor levanto la mirada y sonrió. Una idea vino a su mente e hizo una mueca.

-Calle.- la llamó con la mirada baja.

-Si?-

-Tú... Tú estuviste con Poché el día que...que eso pasó, verdad?- preguntó insegura.

La pregunta sorprendió a la mayor, si bien Valentina sabia parte de lo que ocurrió nunca le específico los hechos. Y para la mala suerte de la castaña, Vale quería respuestas.

-Eh...sí- desvío la mirada y aclaró la garganta- por qué lo preguntas?.- aún sabiendo la respuesta quería que Vale no preguntará los detalles.