Unos tontos muy tontos

CAP 12. La venganza

Hoy era el día para mí próxima venganza (es decir, el pegamento) y para ver la cara de Jacob al oler y abrir su taquilla, seguramente olería a mejillón podrido y encima yo sabía que Jacob detestaba los mejillones, era todo perfecto, cuando vi a  Jacob entrar por la puerta me acerqué disimuladamente a su taquilla y me puse en un ángulo desde el que se pudiera ver bien su taquilla y cuando fue a abrirla...¡¡¡SORPRESA!!!

Tal y como yo tenía pensado y sabía que sucedería algunos mejillones cayeron encima de Jacob y todo el pasillo olía a mejillón (osea que olía a mierda, a pesar de que a mí me gustaban los mejillones seguía oliendo a mierda)

Jacob estaba súper indignado y como no sabía que era yo él que lo había hecho todo estaba bajo control.

Lo que si que no se esperaría era que no había terminado y eso no era lo único que le esperaba porque hoy se iba a humillar delante de todos sus amiguitos más de lo que ya lo había hecho con los mejillones, le habían visto todos.

Nos fuimos al recreo y mi idea era llegar el primero a clase después de terminarme el bocadillo y echar el pegamento en la silla de Jacob sin que nadie me viera.

Y así fue, en cuanto me terminé el bocadillo de salami fui corriendo a la clase y eche un poco de pegamento en la silla de Jacob, después salí del aula para que no sospecharan que había sido yo cuando me vieran allí solo y todo listo.

Cuando sonó el timbre entré con todos los demás y esperé a que llegara el momento en el que Jacob se tuviera que levantar y no pudiera porque estaba pegado.
(Obviamente puse poco pegamento para que con un gran esfuerzo si consiguiera levantarse, pero sí que era lo suficiente para asustarle).